¿Cuándo fue que Acapulco dejó de ser el “paraíso” que los políticos y los medios presentaban en las últimas décadas del siglo XX?
Creo que fue a partir de los 90. El huracán ‘Paulina’ en 1997 vino a descubrir muchísimas cosas. Hubo muchísimas muertes. Fueron en las áreas más marginadas del puerto, aunque también le tocó a Costa Azul, una colonia clasemediera, pero el mayor número de víctimas ocurrió en las zonas marginadas. Ese fue un sacudidón de que el “Estado de bienestar” del que gozaba toda la población acá en Acapulco era un mito. Hay una pobreza terrible y ahora ya se conoce. Acapulco es la ciudad con mayor pobreza urbana del país, según el Coneval, y además durante muchos años, 2012, 2013, 2014, fue la ciudad más violenta del mundo junto con San Pedro Sula y Caracas, ahora se mantiene en cuarto o quinto lugar. Digamos que ese fue el inicio de la decadencia en términos de la ideología de que en Acapulco todo era bello y de ensueño.
Pero cuando se da la peor situación es a partir de 2005-2006, cuando ocurre el enfrentamiento en La Garita entre policías municipales y narcotraficantes del Cártel de Sinaloa, y perecen ahí unos del cártel pero dos meses después aparecen cabezas cercenadas de los policías que participaron en ese enfrentamiento. A partir de ahí, los enfrentamientos y los crímenes violentos, los homicidios dolosos, empezaron a subir hasta el punto de que en 2012 Acapulco tenía un promedio de 2,300, 2,400 asesinatos al año, un promedio de seis al día. Ya para 2013, Acapulco no tenía visitantes extranjeros. Los springbreakers iban por cientos a los hoteles de La Costera y dejaron de ir. La agencia que los llevaba dejó de ver a Acapulco como una opción segura para los muchachos.
¿Qué papel jugó la violencia del crimen organizado en esa revelación de los problemas de Acapulco? ¿Cuáles fueron los grupos protagónicos?
Eran dos nada más, los Beltrán Leyva y el Cártel de Sinaloa. Tenían una especie de pacto, que se llamaba La Federación, donde todos tenían sus zonas, el país repartido entre ellos, trabajaban en coordinación, etcétera, pero después empezó a haber pugnas. En Guerrero, en un tiempo estaban los dos, la gente de Beltrán y la gente del ‘Chapo’ (Joaquín Guzmán), convivían, se veían a lo mejor con recelo pero se respetaban, pero cuando los Beltrán se pelean con los de Sinaloa, que al final los Beltrán se quedaron con Guerrero, empieza a haber muchísimos pleitos entre los de Sinaloa y los Beltrán aquí en Guerrero.
Eso hizo que explotara la violencia ligada con el narcotráfico en Acapulco. Ahí era el principal centro de venta de drogas por ser destino turístico, los litorales, el trasiego… Se les queda a los Beltrán pero la gente de Sinaloa estaba dando la pelea y eso hizo que Acapulco fuera un baño de sangre. Lo que empeoró la situación fue cuando mataron a Arturo Beltrán en 2009 en Morelos, porque ya no había una cabeza a quien obedecer. Entonces, los grupos que obedecían a unos y otros empezaron a enfrentarse. Todavía peor en 2011, después de que aprehenden a ‘la Barbie’ (Édgar Valdez), porque Acapulco lo tenía controlado él. Cuando lo aprehenden o se entrega, los grupúsculos empiezan a atomizarse y a pelearse por el control de la ciudad y de la venta al menudeo de droga y de otros negocios: extorsión, secuestro, cobro de piso.
Eso hizo que salieran múltiples grupos, el CIDA (Cártel Independiente de Acapulco), La Barredora, La Familia… Se empezaron a pelear entre ellos y terminó siendo lo que sigue siendo. Sigue ese polvorín”.