¿Qué sigue para atender el colapso en el Cerro del Chiquihuite?
Tras el hallazgo de los cuerpos de las últimas víctimas, las autoridades deben estabilizar el terreno, hacer estudios y retirar rocas. Mientras tanto, las casas cercanas deberán permanecer evacuadas.
La noche del martes 21 de septiembre, fueron rescatados los cuerpos de Paola Daniela Campos, de 22 años, y de su hijo de cinco años, últimas víctimas del derrumbe ocurrido en el Cerro del Chiquihuite. Sin embargo, ello no implica que los trabajos de remoción de escombros hayan culminado.
Samuel Gutiérrez Macías, coordinador de Protección Civil del Estado de México, señaló en entrevista este miércoles que, tras la recuperación de los cadáveres de las víctimas mortales faltantes, la labor a seguir en la zona colapsada es la estabilización del terreno para evitar nuevos siniestros, así como realizar los estudios que garanticen la entrada de maquinaria pesada para retirar las rocas.
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Para ello, se necesita construir un muro que ayude a evitar que, en caso de otro deslizamiento de tierra en el cerro, se afecte la zona ya colapsada y se ponga en riesgo a personal de las dependencias mexiquenses y federales que ahí trabajan.
"Los ingenieros y especialistas están haciendo un terraplén o una especie de dique para hacer una tipo pared, en caso de que se desprenda mayor material; después, se generará una plancha para que podamos mantener (el material), y que caiga ahí y ya no ruede o se venga hacia los demás domicilios", expuso Gutiérrez.
Hasta el momento ya se colocaron 2,100 toneladas de material para contener el desprendimiento rocoso e, incluso, no se descarta realizar un derrumbe controlado en el cerro para neutralizar los riesgos.
Un factor en contra de las autoridades es que aún hay lluvias de mediana y fuerte intensidad, lo que deriva en escurrimientos de agua y reblandecimiento de tierra.
"Entonces, tenemos que ir metiendo la maquinaria poco a poco, conforme se vaya estabilizando, para no perder lo poco que tenemos de que no se nos ha movido (el terreno), eso es algo muy importante; se nos han movido algunas rocas que tenemos ahí, estamos en constante monitoreo", dijo el coordinador.
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Familias desalojadas por seguridad
De acuerdo con el funcionario mexiquense, las autoridades que trabajan en la "zona cero" determinaron que el perímetro de riesgo para habitantes es de 200 metros a la redonda.
Bajo estos parámetros, hasta este miércoles se contabilizaron 144 viviendas, las cuales ya fueron notificadas de la necesidad de evacuación para seguridad de la población. En este contexto, el 70% de las casas ya está totalmente desocupado y en el 30% restante se realizó una evacuación parcial.
"Algunas de las personas se quedan ahí o está nada más una persona como de guardia, va por el día, ya no duermen ahí; muchos (van) para dar alimento a sus animales o a sus perros, van, entra ahí un rato y se vuelven a salir", explicó Gutiérrez.
¿Hay riesgo de otro derrumbe?
El funcionario resaltó que, por ser una zona recién colapsada, siempre habrá riesgo latente de que ocurra otro desprendimiento de rocas, dadas las condiciones meteorológicas o sísmicas; no obstante, el peligro puede disminuir con el avance de los trabajos de estabilización.
El trabajo que sigue es realizar estudios de grietas e inestabilidad de suelo en otros puntos del cerro en colonias aledañas.
"Cuando tengamos el estudio integral, podemos saber en dónde son las otras zonas que tenemos que observar y ver si tenemos que evacuar algunas de otras zonas; hasta el momento, te puedo decir que lo que más nos preocupa y donde tenemos la mayor prioridad y el mayor riesgo es en la zona donde tuvimos el desprendimiento", explicó el coordinador.
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Promesa de reubicación
En la conferencia matutina de este martes, el presidente Andrés Manuel López Obrador prometió que las familias desalojadas en la colonia Lázaro Cárdenas podrían ser reubicadas a otras zonas del Estado de México.
Sin embargo, hasta el momento ni el gobierno federal ni el mexiquense han ofrecido detalles sobre este proyecto o sobre si ya existe un terreno donde se podría reubicar a estas 144 familias.
Según fuentes del municipio de Tlalnepantla, primero se deberá completar un censo de las familias afectadas y, una vez que se junte la información correspondiente, comenzará el proceso de negociación con cada dueño de los predios.