En respuesta, López-Gatell aseguró en conferencia de prensa del "Informe diario sobre coronavirus COVID-19 en México" que no hay pruebas rápidas útiles en este momento.
Según explicó el subsecretario de Salud, pese a que se decía que la consecuencia de usar pruebas rápidas era un buen control epidémico y se comenzó con una fuerte presión para que la Secretaría de Salud comenzará con la utilización de estas pruebas, esta dependencia verificó que en otros países como Alemania no se utilizan pruebas rápidas, igual que la mayoría de los países de la región europea, pues no se tiene reconocida a ninguna prueba rápida como una prueba útil para esta epidemia.
"Se había invocado también que la agencia de fármacos y alimentos, de regulación de fármacos y alimentos de Estados Unidos, conocida por sus siglas FDA, había autorizado una prueba rápida. También, con la colaboración de la Embajada de Estados Unidos y apelando a lazos de colaboración profesional de experiencias previas, tuvimos una conversación con dirigentes de la FDA y nos confirmaron que FDA no ha acreditado ninguna prueba rápida para el coronavirus, para su uso en esta epidemia", explicó López- Gatell.
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"Extendimos la búsqueda a Canadá, al Laboratorio Nacional de Microbiología, lo mismo, Canadá no utiliza pruebas rápidas. La Organización Panamericana de la Salud, Organización Mundial de la Salud, ha publicado, está disponible desde hace unos tres días, un posicionamiento técnico, explícito que dice: ‘En este momento ninguna autoridad sanitaria competente del mundo ha acreditado pruebas rápidas", dijo el subsecretario de Salud.
"No hay pruebas rápidas competentes. Hasta el momento ni México -y asumo que tampoco otros países- tiene una resistencia programada a no usar pruebas rápidas, pero si no son competentes, no tenemos por qué utilizarlas. Ese es el punto importante", explicó el subsecretario.