El gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, anunció este miércoles que luego de que gobernadores y el gobierno federal de México firmaron un pacto de gobernabilidad y unidad ante la emergencia sanitaria por el coronavirus COVID- 19, su administración estableció un plazo de 24 horas para que las actividades económicas no necesarias acaten la suspensión de labores.
Por ello, a partir de las 7:00 de la tarde, su administración iniciará la supervisión de cumplimiento de estas medidas.
En conferencia de prensa, Alfaro Ramírez detalló que esta supervisión se hará con el apoyo de los gobiernos municipales y de la Secretaría de Trabajo estatal, y aunque aún no se ha puntualizado del todo las sanciones a las que se harán acreedores quienes no acaten esta medida, Marco Valerio Pérez Gollaz, secretario de Trabajo y Previsión Social, adelantó que podrían ser económicas o hasta la propia clausura de los negocios o empresas.
El mandatario estatal dijo demás que por ahora, algunas de las actividades que no quedarán suspendidas son:
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Enrique Alfaro también adelantó que su gobierno, empresarios y sindicatos de trabajadores de Jalisco, de manera conjunta, harán un llamado el gobierno federal y al presidente Andrés Manuel López Obrador para "reconsiderar la postura respecto al respaldo que la iniciativa privada necesita para enfrentar esta circunstancia".
"Es indispensable que el gobierno de Mexico establezca una ruta de apoyo que sea adecuada. Los empresarios no están pidiendo una condonación de impuestos, están pidiendo, literalmente, oxigeno para poder hacer su parte", dijo.
También insistió en que esta petición debe ser atendida y ser motivo de un acuerdo a nivel nacional para encontrar la manera de que los empresarios puedan seguir garantizando que la gente no pierda sus trabajos.
"Vamos a hacer el primer llamado conjunto para reconsiderar esta postura", dijo.
Durante la conferencia de prensa, Enrique Alfaro explicó que en la videoreunión que se sostuvo entre gobernadores e integrantes del gobierno federal respecto a la emergencia sanitaria por COVID-19, varios mandatarios estatales se pronunciaron sobre las pruebas rápidas, pidiendo que las autoridades sanitarias del país establezcan y definan cuáles pruebas podrían aplicar y adquirir para diagnosticar la infección de este virus.
"Los gobernadores pedimos que definan cuales pruebas, nosotros ni siquiera decimos estas o estas, lo que pedimos es que le permitan a la Cofepris (Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios) —con su certificación — decir cuales puedan ser importadas", dijo.
El gobernador de Jalisco explicó que pese a que su gobierno había anunciado la aplicación masiva de pruebas rápidas, el problema que enfrentó su administración es que éstas no pudieron ser importadas a México porque no tienen la certificación de Cofrepris.
"Lo que dijimos varios gobernadores es que entendemos que el esquema bajo el cual se estarían aplicando las pruebas rápidas es como un mecanismo de prevención y de detección temprana, es decir, si un caso es detectado como positivo por una prueba rápida a ese caso se le aplicaría para reforzar el diagnostico una prueba PCR para poder tener resultados más precisos pero ya con las pruebas rápidas podríamos tener ya una detección inicial y poder iniciar a aislar pacientes y poder evitar más contagios", explicó.
Finalmente, agregó, que el acuerdo de este martes con el gobierno federal y con el subsecretarío de Salud, Hugo López- Gatell en un plazo no mayor de 72 horas habría una respuesta del respecto a las pruebas rápidas como medida de prevención.
"No quiero yo pensar que lo que esta haciendo López-Gatell es cuidar la estadística, porque sería, literal, un acto de traición a la patria", agregó.
