Estados se suman al Insabi, pero sin aclarar el destino de 5,249.8 mdp

De acuerdo con la ASF, el mayor monto por recuperar corresponde al año 2018, cuando no se comprobaron 4,842.6 millones de pesos, mientras que, en 2015, la cifra asciende a 407.2 mdp. Destaca que Oaxaca y Chiapas son los estados que más recursos tienen bajo este concepto.

Oaxaca, gobernada actualmente por el priista Alejandro Murat, es uno de los estados que ya aceptaron adherirse al nuevo Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), incluso sin conocer las reglas de cómo va a funcionar y cómo se van a repartir los recursos para 2020. Hasta la fecha, esta entidad tiene montos por recuperar, en 2018, por 1,4446.3 mdp y 3.6 mdp, en 2015.

En el caso de Chiapas, el monto es de 1,068.1 mdp solo en 2018, el último año de gobierno de Manuel Velasco (PVEM), quien dejó su cargo antes de concluir su periodo luego de que en las elecciones de 2018 pidiera licencia y obtuviera un puesto en el Senado de la República.

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Entre las anomalías detectadas en las finanzas estatales destaca que en la mayor´ía de los casos los recursos se utilizaron para fines distintos a los que estaban destinados como al pago de trabajadores o el pago de nómina, así como la adquisición de bienes que no se compraron.

¿Cómo se repartirán los recursos para 2020?

De acuerdo con la reforma en salud del año pasado, los estados que se adhieran al Insabi tendrán que transferir sus recursos por medio de convenios para que la federación se haga cargo de los servicios de salud.

Los estados que no lo hagan también firmarán un acuerdo de coordinación, pero se harán cargo de la atención y seguirán recibiendo sus aportaciones como marca la ley. Esto último como lo aseguró el presidente Andrés Manuel López Obrador.

El gobierno federal ha dicho que 21 estados aceptaron adherirse al Instituto de Salud; sin embargo, en esa relación tiene contem`pladas algunas entidades del PAN, cuyos gobernadores han dicho que no lo harán, como el caso de Mauricio Villa, de Yucatán.

Para este año, se destinaron 103,371.5 mdp para el FASSA. Hasta 2019, estos recursos se distribuían a partir de fórmulas, indicadores, criterios, calendarios y destino, establecidos en la Ley de Coordinación Fiscal. No obstante con los acuerdos de coordinación, esto dependerá de lo que se firme.

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Para el exsecretario de Salud en el gobierno de Felipe Calderón, Salomón Chertorivsky, el que no haya una regla clara de cómo se van a distribuir los recursos genera preocupación:

“Tendría que aclararse qué reglas de corresponsabilidad y, sobre todo, de financiamiento van a acreditar para estas entidades (…) surge la preocupación de que la transferencia de los recursos regrese a ser discrecional”, asegura.

Por su parte, el diputado Éctor Ramírez (PAN) –quien ha participado en las mesas de negociación con las autoridades en salud– señala que la ley establece que el monto que se le dé a los estados en 2020 no puede ser menor al otorgado en el año fiscal anterior, por lo que la repartición será con la base del 2019.