Publicidad
Publicidad

La jugada de Morena para quitar a Winckler de la Fiscalía de Veracruz

Morena logró lo que no pudo hacer en febrero de este mismo año mediante un juicio político: quitar a Jorge Winckler del cargo, aunque de manera temporal, con un Punto de Acuerdo.
mié 04 septiembre 2019 05:00 AM
Jorge Winckler
Jorge Winckler gozará de su salario en tanto se resuelva si es removido o no de manera definitiva de la Fiscalía General del Estado de Veracruz,

Los legisladores de Morena se valieron de un sorpresivo Punto de Acuerdo, un dispositivo policíaco, un Congreso funcionando con una diputación permanente y una sesión exprés para remover a Jorge Winckler de la Fiscalía General del Estado de Veracruz (FGE).

La Junta de Coordinación Política (Jucopo) del Congreso de Veracruz, encabezada por Morena, planteó en un Punto de Acuerdo separarlo del cargo porque supuestamente no ha certificado ni revalidado su confianza y no está registrado como alto mando. Morena logró con ese recurso –avalado con 8 votos a favor y cuatro en contra– lo que no pudo hacer en febrero de este mismo año cuando no logró someter al funcionario yunista a un juicio político.

Publicidad

El Punto de Acuerdo fue incluido de último momento en el orden del día de la tercera sesión de la Comisión Permanente y fue el único tema que se trató luego de que se descartaran los otros a petición del presidente de la Jucopo, el morenista Juan Javier Gómez Cazarín.

En el documento, la Jucopo señaló que constitucionalmente se establece que ningún funcionario puede ingresar a las instituciones de seguridad pública si no ha sido debidamente certificado y registrado.

El órgano legislativo resaltó "que los exámenes de control y confianza son los únicos instrumentos idóneos para acreditar que, quien está al mando de una institución de procuración de justicia, posee al menos, ciertas cualidades indispensables para el ejercicio de las actividades dentro del servicio público" y garantizan "que quienes están al frente de las instituciones de seguridad cuentan con validez y certeza jurídica en sus actuaciones".

Te puede interesar: La violencia en Veracruz enciende otra vez el pleito entre gobernador y fiscal

“Dada la gravedad, urgencia y necesidad de evitar daños irreparables a derechos fundamentales de los veracruzanos en materia de procuración de justicia, tutela judicial efectiva y seguridad jurídica, como medida cautelar, control y defensa de la supremacía constitucional se resuelve separar temporalmente al C. Jorge Winckler Ortiz del cargo de Fiscal General del Estado por el presunto incumplimiento del mandato constitucional de contar con certificación, revalidación y registro correspondientes, necesarios para el ingreso y permanencia en el cargo”, argumentó la Jucopo.

Publicidad

En la resolución avalada de manera exprés se explica que además de la remoción se integrará como encargada de despacho a Verónica Hernández Giadáns, quien es parte del equipo del secretario de Gobierno estatal, Eric Cisneros.

Y se advierte que el proceso se extenderá para determinar si Winckler deberá ser removido de manera definitiva.

“Los agentes del Ministerio Público, los peritos y los miembros de las instituciones policiales de la Federación, las entidades federativas y los Municipios, podrán ser separados de sus cargos si no cumplen con los requisitos que las leyes vigentes en el momento del acto señalen para permanecer en dichas instituciones, o removidos por incurrir en responsabilidad en el desempeño de sus funciones... “, dice la argumentación.

Veracruz_Fiscal-1.jpg
La directora jurídica de la Secretaría de Gobierno, Verónica Hernández Giadáns, quedó como encargada de despacho de la Fiscalía General del Estado de Veracruz.

Publicidad

Winckler anuncia batalla

Al conocer la decisión del Poder Legislativo, Jorge Winckler acusó que su cese es un acto al margen de la ley, advirtió que interpondrá recursos de revisión y responsabilizó al presidente Andrés Manuel López Obrador y al gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García, de su integridad y la de su familia.

A través de un comunicado emitido de manera inmediata al cese, recordó que su remoción viola la Constitución de Veracruz, la Ley Orgánica de la Fiscalía, además de hacer caso omiso al amparo que obtuvo en los primeros meses de este año.

“Viola una suspensión definitiva vigente, que prohíbe destituir al Fiscal General a través de mecanismos no contemplados en la Ley al momento de su designación. Además de una arbitrariedad, constituye un delito federal”, alegó.

Por la noche, Winckler dijo que legalmente aún es titular de la FGE y seguirá en funciones.

“Yo sigo trabajando, sigo siendo el fiscal general del estado de Veracruz y con ese cargo seguiré defendiéndome, a mí en lo particular y sobre todo a la sociedad veracruzana que requiere un fiscal autónomo que no esté sometido a las decisiones del Ejecutivo del estado y sobre todo convencido de que este es un acto que no goza del respaldo del señor Presidente de la República”, dijo la noche del martes en conferencia de prensa.

Además afirmó que ha cumplido con su certificación y validaciones de confianza.

“Se refieren a qué hay una falta de evaluación. Eso es falso, yo estoy evaluado y aprobado en control de confianza. Si alguien no lo quiere ni siquiera entender, no tuvo la sapiencia o la educación de pedirle al fiscal general, a través de una simple garantía de audiencia, enseñarle la documentación a través de la cual fue evaluado y aprobado en control de confianza”, afirmó.

Aunque no mostró ningún documento dijo que como funcionario público tiene también el aval de agencias estadounidenses.

“Si se requiere más pruebas o llevar a cabo cualquier investigación en relación a mi persona jamás lo he ocultado, yo no soy un delincuente. Estoy avalado, no solo a nivel nacional, sino también a nivel internacional por agencias norteamericanas con las cuales gozo de total confianza como funcionario publico”, agregó.

Y puso en duda el recurso legislativo que llevó a su remoción: “Fue un acuerdo ni siquiera es un decreto, es un acuerdo (...) impugnaré con los recursos legales que tenemos a nuestro alcance, confiamos plenamente en nuestro Estado de derecho y confiamos plenamente en el Poder Judicial Federal”.

Recomendamos: Los feminicidios azotan Veracruz en medio de autoridades confrontadas

El inicio del conflicto y el inicio de otro

El conflicto entre el gobierno de Cuitláhuac García y Jorge Winckler inició durante las campañas para renovar la gubernatura, en 2018, cuando el entonces gobernador panista, Miguel Ángel Yunes, enderezó críticas contra el entonces abanderado de Morena a la gubernatura y el aspirante a la presidencia López Obrador: los acusó de mantener pactos con Javier Duarte, otro de los enemigos del panista.

La elección la perdió el delfín del gobernador, su hijo también panista, Miguel Ángel Yunes Márquez, y los votos dieron el triunfo al morenista García Jiménez. Pero Jorge Winckler, designado fiscal en el bienio yunista, permaneció en el cargo por las reformas que dieron autonomía a la FGE y establecen una permanencia de nueve años para su titular, con el fin de evitar componendas políticas.

Lo que siguió fueron enfrentamientos constantes utilizando los medios de comunicación como arena política, que en febrero de 2019 derivaron en un primer intento de los legisladores de Morena para destituir a Winckler, pero no lo lograron a pesar de que pospusieron la sesión hasta tres semanas durante las cuales trataron de reunir los votos necesarios para llevar a juicio político al abogado del estado.

Poco después de librar el juicio político, el fiscal lanzó un mensaje al gobernador para dejar a un lado las fricciones entre ambos, lo que tampoco se concretó.

Y este lunes 2 de septiembre tanto Winckler como Cuitláhuac García participaron en la reunión de seguridad y se aseguró que ya frenarían la disputa.

Pero este martes se removía a Jorge Winckler mientras su suplente tomaba posesión en las instalaciones de la FGE apoyada por un dispositivo de seguridad.

Newsletter

Los hechos que a la sociedad mexicana nos interesan.

Publicidad

MGID recomienda

Publicidad