¿Quién es García Harfuch?, ¿cuál es su trayectoria?
Originario de Cuernavaca, Morelos, Omar García Harfuch es licenciado en Derecho por la Universidad Continental y licenciado en Seguridad Pública por la Universidad del Valle de México.
Su historia familiar lo marca en el tema de seguridad pública. El dato polémico es que es hijo y nieto de dos ex funcionarios de alto rango en la materia: Javier García Paniagua, quien fue titular de la desaparecida Dirección Federal de Seguridad en el sexenio de José López Portillo es su padre. Y también destaca que es nieto de Marcelino García Barragán, secretario de la Defensa a finales de la década de los 60, cuando se registró la masacre de Tlatelolco 1968.
Eso explica su biografía académica. Harfuch cuenta con diversos cursos, entre los que destacan: diplomado Senior Executive in National and International Security, por la Universidad de Harvard; el Seminario para el Desarrollo de Agentes del Orden del Gobierno de la República Mexicana, impartido por el FBI en Quantico, Virginia, y el curso de Narcotics Unit Commanders Course, auspiciado por la agencia antidrogas de EU (DEA, por sus siglas en inglés).
La principal crítica a su trayectoria profesional es haber pertenecido a instituciones policiacas en las que el mando era Genaro García Luna.
En 2008, en el gobierno del expresidente Felipe Calderón fue jefe de departamento de la coordinación de inteligencia para la prevención del delito de la Policía Federal, corporación creada en esa administración por Genaro García Luna. Cuestionado sobre el tema, el propio Harfuch declaró que nunca estuvo a las órdenes de quien fuera secretario de Seguridad de Felipe Calderón, hoy preso en Estados Unidos.
De 2012 a 2014, en el gobierno del expresidente Enrique Peña Nieto, Harfuch fue coordinador de la Policía Federal en el estado de Guerrero, sobre ese episodio se le relaciona con haber participado en trabajar con el procurador Jesús Murillo Karam, en lo que fue la llamada "verdad histórica" sobre el ataque y desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa.
Concretamente, la Fiscalía General de la República señaló que García Harfuch participó en el cónclave del 7 de octubre de 2014 en Iguala, Guerrero, donde se organizó ese plan para ocultar lo que realmente sucedió con los estudiantes.
También sobre ese hecho, Harfuch se deslindó de las acusaciones; incluso explicó que las fechas de lo investigado sobre el caso Ayotzinapa no toman en cuenta sobre su transferencia.
Sobre ambas acusaciones, es decir, haber trabajado con García Luna y haber ayudado a que se fabricara la "verdad histórica", la entonces jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, acusó que se trataba de acusaciones fuera de la realidad.
En 2016, Harfuch ingresó a la entonces Procuraduría General de la República (PGR) como titular de la Agencia de Investigación Criminal hasta que renunció a su cargo en junio de 2019 para incorporarse a la Fiscalía de Justicia de la Ciudad de México como jefe general de la Policía de Investigación.
En octubre de 2019, Harfuch fue nombrado por la entonces jefa de gobierno Claudia Sheinbaum como secretario de Seguridad Ciudadana en sustitución de Jesús Orta, quien fue investigado por peculado y el presunto desvío de 2,500 millones de pesos para la compra de aeronaves para la Policía Federal.
Los números de Harfuch en CDMX
No tardó mucho tiempo en el cargo para evidenciarse que la estrategia del funcionario se concentró en atacar de manera frontal a los líderes de bandas delictivas con presencia local y nacional, entre ellos: Oscar Andrés Flores “El Lunares”, presunto cabecilla de La Unión Tepito; Carlos Fernando Huerta, “El Viejón”, sicario del Cártel Jalisco Nueva Generación”; Carlos “N” alias “El Santero”, operador de La Unión, encargado de sobornar a elementos de la SSC y FGJ. Los nombres de alto impacto posicionaron a Harfuch en los medios de comunicación.
Esa misma estrategia se presume que fue la causa del atentado en cu contra en junio de 2020; la camioneta del secretario fue atacada sobre Paseo de la Reforma por parte del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), expresamente el funcionario lo especificó, evento del que resultó con lesiones menores pese a que el vehículo en que viajaba recibió más de 300 disparos de arma de grueso calibre.
El secretario de Seguridad de la CDMX sufre atentado
De acuerdo con su último informe, la Secretaría de Seguridad Ciudadana ha logrado desarticular de 2020 a 2023 a un total de 254 células y, con ello, ha logrado la captura de más de 2,200 líderes de organizaciones criminales, jefes de plaza, jefes de célula, operadores financieros y extorsionadores.
En materia de homicidios dolosos, el informe publicado por el gabinete de seguridad de la Ciudad de México destaca que el promedio diario de homicidios en la capital se redujo de 5.2 en 2019 a 2.1 en 2023.
Para David Saucedo, analista en temas de seguridad, este ataque frontal a los grupos locales de narcomenudistas y a grandes cabezas del crimen organizado ha sido positivo para el jefe de la policía capitalina
“La debilidad de los grupos criminales en la Ciudad de México permitió que las autoridades capitalinas se anotaran muchos éxitos en el combate al crimen organizado y el debilitamiento de las mafias locales ha permitido presumir un descenso real en el número de homicidios”, explicó.