¿Se puede dejar de pagar el Fobaproa? PAN y PRI lo han planteado en Congreso

Desde hace días la presidenta Claudia Sheinbaum ha sostenido un enfrentamiento verbal con el expresidente Ernesto Zedillo, luego de que éste acusó, en entrevista con la revista Nexos, que hay autoritarismo y murió la democracia con la Reforma Judicial.

“A partir de mañana vamos a informar el Fobaproa… qué es el Fobaproa, qué es ahora el IPAB, cuánto está pagando cada mexicano y cada mexicana, a quién se le dieron recursos… porque no se puede hablar tan impunemente”, dijo la mandataria.

En respaldo a Sheinbaum, Morena se ha sumado al debate y ha propuesto revivir las investigaciones legislativas por irregularidades entorno al Fobaproa, razón por la que, aseguran, el exmandatario Zedillo no tiene autoridad para criticar al gobierno actual.

¿Qué es el Fobaproa?

El Fobaproa fue un mecanismo por el cual el Estado absorbió la deuda privada de personas y empresas que, ante la crisis de diciembre de 1994, enfrentaron una situación de impagos.

Para evitar una crisis financiera y que los bancos quebraran al no recibir los pagos de los deudores, el gobierno usó ese Fondo en 1995 –mismo que en realidad ya existía desde 1990- para asumir las deudas, es decir, rescató a los deudores para mantener la estabilidad financiera del país.

Pero esos deudores no sólo eran personas que no pudieron pagar sus créditos, sino también a grandes empresas que cargaron al Fobaproa sus multimillonarias deudas. Todas ellas, que eran deudas privadas, se convirtieron en deuda pública y hasta la fecha aún se pagan.

En 1998, al crearse el Instituto de Protección al Ahorro Bancario (IPAB), éste asumió prácticamente la totalidad de los pasivos del Fobaproa, en total 725,000 millones de pesos, buena parte de ellos de deudas que no debieron absorberse, por tratarse de créditos personales (de accionistas), créditos de alto riesgo (no recuperables), entre otros.

Desde 1995, año con año, en el paquete económico se dedica una parte para mantener esos pagos y en este año 2025 el Presupuesto autorizó destinar 52,400 millones de pesos.

¿Qué propuestas existen en torno al Fobaproa?

De acuerdo con el Partido Revolucionario Institucional (PRI), hasta 2025 ese mecanismo (ahora IPAB) ha recibido 840,000 millones de pesos en recursos presupuestarios, por lo que “la deuda ya está más que pagada”, asegura el coordinador de los diputados del PRI, Rubén Moreira.

Por eso desde noviembre el PRI comenzó a impulsar la idea de eliminar el pago de una parte, por lo menos 40,000 de pesos destinados al IPAB-Fobaproa y redirigirlos a recursos a educación, salud y otros rubros prioritarios.

El 27 del mismo mes incluso el aliado de Morena, el Partido del Trabajo (PT) se sumó y presentó una iniciativa para derogar leyes relacionadas con el Fobaproa y cesar pagos.

“La deuda del Fobaproa es inmoral, inconstitucional e ilegal y representa un severo robo a la nación y a todos los mexicanos, que se ha tenido que pagar desde el año 2000, por lo que es indispensable eliminarla de inmediato”, dijo la diputada petista Magdalena Núñez Monreal.

La deuda original era de 552,000 millones y con el paso de los años se han pagado más de 1.3 billones en intereses, sostuvo al proponer la cancelación de los pagos.

En diciembre, al presentar su presupuesto “alternativo”, el diputado y vicecoordinador económico de la bancada del PAN, Héctor Saúl Téllez, también propuso cancelar todo pago a ese instrumento.

“Cero pesos para el IPAB (Fobaproa) para el 2025, llegó el momento de acabar con esa carga fiscal a los contribuyentes y terminar con los apoyos que recibe la banca comercial. Con ese movimiento podrían reasignarse a otros rubros como salud, educación y seguridad”, dijo.

¿Por qué se sigue pagando el IPAB-Fobaproa?

Aunque Morena ha criticado el Fobaproa, la noche del 11 de diciembre pasado, al discutirse el Presupuesto 2025, rechazó una moción suspensiva propuesta por el PRI para que con la cancelación de pagos a ese rubro se generara una bolsa de recursos a reasignar.

“Este Fobaproa ya es de Morena y, por cierto, muchos de los que lo votaron hoy están en Morena”, dijo el priista Moreira para apoyar a esos legisladores.

También se rechazaron reservas del PAN en ese sentido y el PT de plano ya no presentó su reserva aunque al inicio de la discusión había mantenido su propuesta.

Para retar a las bancadas de Morena y sus aliados, el panista Federico Döring recordó que el ahora morenista y entonces perredista Pablo Gómez alertó que cuando la izquierda controlara el Congreso, se cancelarían los pagos.

En 1998 Gómez advirtió: “esto es tragarse la deuda entera del Fobaproa y obligar a la Cámara a pagarla desde ahora y para siempre, pero la Cámara cambiará de composición y el Congreso también y tendrá que reivindicar la soberanía popular para impedir este atraco que hoy va a cometerse”.

Sin embargo Morena votó en contra de las reservas. La diputada Dolores Padierna también protagonista de ese momento, experredista y ahora de Morena, explicó que no se pueden suspender los pagos.

“No tienen vergüenza”, les dijo a PRI y PAN, al recordar el 12 de diciembre de hace 26 años en que ambos “aprobaron el mayor atraco a la nación llamado Fobaproa. El presidente Zedillo, priista, en una nota a pie de página pedía que se convirtiera la deuda de los banqueros, 12 banqueros, en deuda pública. Pedía el sinvergüenza de Zedillo”.

Pero ahora, con todo lo que se ha destinado, dijo, “únicamente estamos pagando los intereses de esa deuda. Si se pudiera cancelar la deuda, cancelaríamos el Fobaproa, el rescate carretero, el rescate azucarero”.

¿Qué va a pasar con el Fobaproa?

El pasado miércoles 30 de marzo, al concluir el periodo de sesiones ordinarias, el PRI insistió en que es viable dejar de pagar y presentó una nueva iniciativa de reforma para derogar la parte donde se transfirieron los pasivos y obligaciones del Fobaproa al IPAB, por ser ilegales.

“Se transfirieron al IPAB, pasivos (deudas) de operaciones que no estaban permitidas por el propio fondo y que beneficiaron a grandes deudores, y a instituciones bancarias y a sus accionistas; dichas operaciones fueron señaladas y advertidas tanto en el Informe Mackey como por la Auditoria Superior de la Federación en la Revisión de las Cuentas Públicas de 2000 y 2001”, admitió el PRI.

Tras ese reconocimiento, indicó en su propuesta, el IPAB, nació con una deuda de 725,000 millones de pesos, derivado de una deuda original del Fobaproa por 552,000 millones de pesos y entre los años de 1999 a 2024 ha recibido 795, 000 millones de pesos a través del Ramo 34.

Por tanto, “es claro que la deuda está más que saldada y el país requiere asignar recursos presupuestarios a proyectos de conservación de carreteras, infraestructura hidráulica, apoyo al campo y fondos para las entidades federativas”.

En tanto, el PAN –que también votó a favor de esa deuda- dijo que connotados morenistas que fueron panistas o priistas son corresponsables. “Ese sábado 12 de diciembre de 1998 fueron parte de los 326 votos a favor de una intervención financiera por 552 mil millones de pesos que serían pagados por las y los mexicanos a través del Fobaproa”, indicó Noemí Luna, diputada federal del PAN.

Hoy “casi 27 años después, siendo militantes de Morena, prefieren callar como momias” y entre ellos están Ignacio Mier y Javier Corral, senadores de Morena, el primero expriísta y el segundo expanista, agregó.

También el ahora gobernador de Nayarit Miguel Ángel Navarro, Luisa Cortés Carrillo, integrante del Consejo estatal de Morena-Oaxaca; Javier Guerrero García, director de Operación y Evaluación del IMSS Michoacán; Juan Carlos Gómez Aranda, coordinador de asesores del gobernador de Chiapas; Crisógono Sánchez Lara, secretario del Trabajo y Previsión Social de San Luis Potosí.