Publicidad
Publicidad

Aunque es delito, el maltrato animal persiste en la Ciudad de México

En este año hay 2,936 denuncias presentadas. Organizaciones animalistas piden respuesta más oportuna de las autoridades para atender las agresiones a los "seres sintientes" que habitan la ciudad.
mar 16 septiembre 2025 11:59 PM
El maltrato animal persiste en la CDMX a pesar de que es delito: van 2,936 denuncias este año
El caso de "Apolo", un perro maltratado en una casa de la alcaldía Azcapotzalco, provocó una manifestación para exigir la destitución de la directora de la Brigada de Vigilancia Animal.

El caso de Apolo, un perro husky que pasó al menos nueve días a la intemperie, sin agua ni alimento, antes de ser rescatado, muestra que el maltrato animal persiste en la Ciudad de México, pese a que es un delito sancionado hasta con tres años de prisión.

Activistas batallan para que sus denuncias sean atendidas y se rescate a los animales; denuncian falta de respuesta y coordinación de las autoridades encargadas de atender las agresiones a estos seres, declarados como "sintientes" en el Código Civil local.

De enero a agosto de este año se presentaron 2,936 denuncias por maltrato animal ante la Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial (PAOT) en la Ciudad de México, una de las tres autoridades encargadas de vigilar el bienestar animal.

Publicidad

Las otras dos son la Brigada de Vigilancia Animal, con elementos de la Policía capitalina, y la Agencia de Atención Animal (Agatan) de la Secretaría del Medio Ambiente.

Mientras que en la Fiscalía capitalina se abrieron 2,006 carpetas de investigación por maltrato animal de 2018 a 2024, pero de estas solo 389 se judicializaron, es decir, 19.4%.

“De todas las instancias de gobierno no se hace una”, advierte Norma Huerta, directora de la asociación civil Mundo Patitas, dedicada al rescate de perros desde 2009.

¿Y las autoridades?

El abandono de Apolo fue denunciado por vecinos en redes sociales y en medios de comunicación, e incluso reportado ante la Brigada de Vigilancia Animal y la Procuraduría Ambiental.

Ninguna de estas dos autoridades rescató a Apolo, tampoco a otros perros maltratados dentro del mismo domicilio en la alcaldía Azcapotzalco. La PAOT se limitó a pegar un oficio en la puerta, pese al riesgo para la vida de los animales.

Apenas el 10 de septiembre, organizaciones animalistas se manifestaron frente a la Secretaría de Seguridad Ciudadana para exigir la destitución de la directora de la Brigada de Vigilancia Animal, Mónica Ballesteros Garduño.

La falta de acción ante la denuncia por el caso de Apolo, la acusación de haber desaparecido y suplantado a los perros Fursio y Puppy, la tolerancia al uso de animales en protestas de defensores de la tauromaquia y la ausencia de operativos en mercados públicos donde se venden animales, son algunas de las razones de las y los activistas para pedir la renuncia de Ballesteros.

En el caso de Apolo, incluso fue rescatado por dos periodistas, quienes fueron denunciados por allanamiento de morada. Los comunicadores decidieron actuar cuando no hubo respuesta de las autoridades.

Tanto la Brigada de Vigilancia Animal como la PAOT se limitan a acudir al sitio de la denuncia en casos de maltrato para intentar conseguir una mediación con la persona señalada de maltrato o la entrega del animal.

“La PAOT es un tiburón sin dientes que no tiene la capacidad de atender las denuncias. A la hora de la acción la ley los faculta para solo ir a tocar y decirle al maltratador '¿Por qué no me regala el perro o el gato maltratado, en buena onda?' y depende la decisión del maltratador”, explica la activista de Mundo Patitas.

Solo cuando se levanta una denuncia ante la Fiscalía capitalina y un Ministerio Público ordena un cateo, las autoridades intervienen sin depender de la voluntad de la persona denunciada, pero en seis años solo en una de cada cinco denuncias el Ministerio Público obtuvo la orden de un juez para hacer una imputación penal en contra de una o varias personas responsables.

Es difícil llegar a la justicia, es ridículo el porcentaje de denuncias que llegan a una sentencia en el rubro de la protección animal".
Norma Huerta, directora de Mundo Patitas.

Publicidad

La primera sentencia

La organización Mundo Patitas logró en 2020 la primera sentencia condenatoria por maltrato animal en la Ciudad de México contra un hombre que abusaba sexualmente de Ámbar, una perra doberman, la cual fue rescatada por la organización.

El responsable recibió una sentencia de un año y medio de prisión, sin embargo, en la experiencia de Huerta este fue uno de los pocos casos de crueldad contra los animales donde se llegó a una sanción.

“Dependemos muchas veces de que el Ministerio Público sea empático y entienda la gravedad del tema, también dependemos del juez, que le dé la seriedad y no termine solo en un regaño y un ‘váyase a su casa’", reconoce.

Esmeralda Narín, del albergue La Madriguera del Michi, comparte que presentó desde hace varias semanas una denuncia ante PAOT por un caso de maltrato animal donde varios perros y gatos se encuentran hacinados dentro de un domicilio, son amarrados y golpeados, sin que -hasta el 10 de septiembre- la dependencia hubiera intervenido.

“Es frustrante denunciar el maltrato animal o el ver a un animal en peligro y saber que, aunque informes a las autoridades, harán caso omiso", reprocha.

Publicidad

Narín considera que en la Ciudad de México hay más conciencia sobre el maltrato animal y la importancia de la denuncia entre gran parte de la población, pero ese avance, sostiene la activista, no va de la mano de una respuesta oportuna de las autoridades.

“Siento que nuestras autoridades no se lo han tomado tan en serio. Son lentos los mecanismos. Como activistas denunciamos constantemente el maltrato animal, pero nos topamos con pared. Los puestos de atención a los animales deben de estar ocupados por animalistas de corazón, presupuestos y difusión en cuanto a prevención", señala Narín.

Como sociedad nos hemos organizado, como sociedad hemos incluso apoyado a las autoridades en recibir a animales que necesitan atención".
Esmeralda Narín, albergue La Madriguera del Michi.

Más acciones frente al maltrato animal

Manuel Talayero, presidente de la comisión de Bienestar Animal en el Congreso capitalino, considera que el problema del maltrato animal es más grande del que se registra en las denuncias oficiales.

“El problema inicia desde que la gente no denuncia, porque si bien es cierto que hay denuncias y año con año se ha venido agravando, estoy seguro que se denuncia apenas un mínimo”, dice el diputado del Partido Verde en entrevista con Expansión Política.

El legislador apunta que las denuncias por maltrato animal representan el 48.4% de los reportes recibidos por PAOT, institución que también atiende construcciones irregulares, violaciones al uso de suelo, ruido, anuncios irregulares, entre otros temas, con un personal limitado y restricciones en su capacidad de acción.

“Desafortunadamente a veces se hacen normas imperfectas, pues aunque está sancionada una conducta al que le toca aplicar esa sanción no la aplica. Ya contamos con muchas leyes, ahora lo que falta es aplicarlas”, sentencia.

Te recomendamos:

De símbolo nacional a especie en crisis: la población de la ballena gris se desploma en México
Medio ambiente

SOS: La ballena gris, la del billete, lucha por sobrevivir en Baja California

Desde la bancada del Partido Verde se impulsa que las alcaldías deban destinar al menos el 2% de su presupuesto anual para acciones a favor del bienestar animal, como campañas de esterilización, servicios veterinarios y campañas informativas para dar a conocer sobre el cuidado necesario para los animales, además de cómo identificar y dónde denunciar casos de maltrato.

El diputado Federico Chávez, secretario de la comisión de Bienestar Animal, considera que el principal problema es la falta de coordinación y seguimiento a las denuncias por parte de las autoridades encargadas de atender casos de maltrato y crueldad contra los animales en la ciudad.

“De nada sirve que implementemos leyes que no vengan con una previsión de cómo las va a ejecutar el gobierno. Ya tenemos el marco normativo de cómo deben operar tanto la PAOT como la Fiscalía para atender estas denuncias, pero vemos que hay una falta de coordinación para poder ejecutar las denuncias que existen”, apunta el diputado del PAN.

Para Chávez, la PAOT debe cumplir con su obligación de dar una resolución a cada denuncia y, en los casos donde sea necesario, pedir la intervención de la Fiscalía General de Justicia o de la Secretaría de Seguridad Ciudadana.

A la par, considera el diputado local, las alcaldías podrían tomar un papel más activo a través de las unidades administrativas a cargo de la protección y bienestar animal con la que deben contar cada una de las 16 demarcaciones.

“Las alcaldías tendrían que caminar con una política pública donde saquen a la calle a sus funcionarios y revisen lo que está pasando en las colonias para acompañar las denuncias”, plantea Chávez.

Newsletter

Los hechos que a la sociedad mexicana nos interesan.

Publicidad

MGID recomienda

Publicidad