Al hacer uso de la palabra, la coordinadora del Grupo Parlamentario de Morena, Martha Avila, dijo que esta ley busca reforzar la identidad institucional de los cuerpos policiacos sin distinción de colores partidistas.
“Quienes ven en esta modificación un interés político y no evitar la clonación de las patrullas evitan mencionar que no solo la alcaldía Benito Juárez utiliza una cromática distinta a las patrullas, también lo hacen en Iztapalapa y Azcapotzalco alcaldías gobernadas hoy por Morena y en las que la policía auxiliar opera con mando único”, expuso ante el pleno.
Aunque las modificaciones fueron aprobadas en lo general, hubo una reserva a la ley por parte de las fracciones parlamentarias del PAN, PRD y PRI para adicionar un párrafo en el que estipulaba que las alcaldías podrían colocar en las patrullas el logo y nombre de la demarcación correspondiente.
“Esta reserva atiende una de las necesidades específicas de los ciudadanos y los alcaldes quienes están preocupados en que se fortalezcan las acciones que inhiban una de las prioridades que tienen los alcaldes de esta ciudad que es garantizar la seguridad ciudadana y la prevención del delito”, dijo el perredista Víctor Hugo Lobo.
La reforma fue aprobada con 56 votos de todas las fracciones parlamentarias concentradas en el Congreso de la Ciudad de México, luego de las diferencias que se generaron entre los alcaldes electos opositores, el gobierno capitalino y autoridades.
Los alcaldes que conforman la UNA-CDMX denunciaron que esta ley inhibía sus intenciones de replicar el modelo de seguridad de Benito Juárez denominado “Blindar BJ”, sin embargo, al tratar de dialogar con diputados este lunes, se encontraron con un cerco policial en inmediaciones del recinto de Donceles y Allende, lo que generó empujones y golpes en su intento por llegar al Congreso.
Tras un diálogo con autoridades capitalinas y diputados, ambas partes llegaron a un acuerdo para aprobar la ley de seguridad ciudadana con la propuesta presentada ante el pleno.