El diputado Miguel Ángel Salazar, del PRI, propuso crear la Ley de Registro de Ofensores Sexuales para que aquellas personas que sean condenadas por uno o más delitos sexuales en la Ciudad de México sean inscritas en un sistema de información que no sería público.
En caso de ser un primer delito sexual su identidad quedaría dentro el registro por 20 años desde su liberación; mientras que en el caso de ofensores sexuales reincidentes sería de por vida.