#ColumnaInvitada | Oportunidad histórica para reorientar el desarrollo en CDMX

Una oportunidad histórica

Los resultados de la elección del 2 de junio significan un reconocimiento a la gestión y los logros del Presidente López Obrador en todo el país y de Claudia Sheinbaum en esta capital. El triunfo de Morena en la Presidencia de la República y en los estados y municipios de la Megalópolis brinda una gran oportunidad para gestionar con otra entidades y municipios la planeación del desarrollo, el ordenamiento territorial y el desarrollo urbano en las diversas escalas de este territorio y no sólo consolidar a la CDMX como una ciudad de derechos, sino también planear y trabajar para darle sustentabilidad a la zona económica más grande del país, con una perspectiva de 40 o 50 años.

Desde la campaña de Clara Brugada, se ha pensado en la importancia del desarrollo metropolitano y con ello la construcción de una relación sana, honesta y sólida con todos los sectores involucrados, que nos ayude a avanzar en esa dirección. Por ello, a través de La Ciudad Que Soñamos, nos dimos a la tarea de convocar a los aliados, pero también a aquellos que dudaban de nuestro proyecto con la finalidad de conocer sus necesidades e inconformidades y con ello a construir una visión de la ciudad que todas y todos queremos, dentro de la pluralidad de voces de esta capital.

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Actualmente, dos instrumentos imprescindibles para aprovechar el contexto político, es la reelaboración del Plan General de Desarrollo y del Programa General de Ordenamiento Territorial. En el primero se definen las políticas de largo plazo en las materias de relevancia estratégica para la Ciudad, incluyendo el desarrollo sustentable y el mejoramiento de la calidad de vida de sus habitantes. El segundo está dirigido a regular la ocupación y utilización sustentable y racional del territorio. Para el adecuado funcionamiento de estos instrumentos de planeación es necesario reconocer y discutir nuestra problemática urbana a partir de una visión metropolitana.

Mencionemos dos grandes temas. El primero es el de la vivienda: para la Zona Metropolitana del Valle de México, entre 1990 y 2020 la población que vivía en la capital se redujo de 53 a 42.6%; en tanto, los habitantes de los municipios metropolitanos pasaron de 47% a 57.4%. Es decir, más de la mitad de la población metropolitana reside ahora en los municipios mexiquenses. Esta creciente dispersión poblacional tiene, como uno de sus factores principales (no único) el costo del suelo y por ende de la vivienda en la CDMX, que se ha hecho inalcanzable para la gran mayoría de sus habitantes. El segundo gran tema es la movilidad y es que, a pesar de los avances, en la práctica no existe una propuesta de transporte público masivo para atender los 4.7 millones de viajes diarios entre la CDMX y el Edomex. Esta situación implica grandes costos para la población, deteriora la competitividad y tienen grandes costos ambientales.

Después de un largo trabajo de análisis, diagnóstico y discusión, que incluyó la participación de más de 14 mil personas en las diversas etapas de consulta, en diciembre pasado el Jefe de Gobierno, Martí Batres, decidió retirar los proyectos de Plan General de Desarrollo y del Programa General de Ordenamiento Territorial del Congreso, por lo cual no fueron aprobados y su procedimiento deberá ser repuesto durante esta administración.

La reelaboración de estos documentos implica diversos frentes de atención. El primero es aprovechar la experiencia ganada y replantear los procesos de difusión y socialización entre la población y los diversos sectores sociales. Segundo, será necesario fortalecer e integrar de manera adecuada el Instituto de Planeación Democrática y Prospectiva de la CDMX (encargado de elaborar el proyecto), para que en conjunto con la Jefatura de Gobierno puedan organizar y llevar a cabo los trabajos técnicos y todas las actividades que garanticen la participación ciudadana. Y por último, el tercer gran tema, es realizar una revisión legislativa, con el propósito de encauzar a todas las instituciones participantes y armonizar la Constitución local, las leyes secundarias y los reglamentos que deberán crearse; así como establecer el financiamiento necesario para su formulación, ejecución y evaluación.

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Conclusiones:
El crecimiento desordenado, horizontal y excluyente de la CDMX ha sido producto de políticas de corto plazo que, a pesar de todo, han permitido erigir una de las zonas económicas con mayor dinamismo en el país.

Sin embargo, los costos ambientales y en términos de desigualdad social han sido enormes y plantean la urgente necesidad de transformar este modelo de crecimiento.

La amplia votación conseguida por la Dra. Claudia Sheinbaum, ex Jefa de Gobierno, el triunfo de Clara Brugada en esta capital y de Morena en los Estados y municipios circunvecinos, es el contexto ideal para construir una visión metropolitana y de largo plazo para enfrentar los principales problemas de la ciudad.

Hoy es el momento de la ciudad, tenemos gobiernos surgidos de sólidas mayorías, decididos a transformar el país y a generar nuevas condiciones de bienestar para las y los mexicanos; como lo he comentado en otras ocasiones, es el momento para mostrar que el desarrollo urbano puede ser un poderoso instrumento de inclusión y bienestar social.

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Nota del editor:

Dunia Ludlow Deloya es experta en políticas públicas; ha sido legisladora en la CDMX; fue subsecretaría de Programas de Alcaldías y Reordenamiento y coordinadora general de la autoridad del Centro Histórico entre otros cargos.