En paralelo, el efecto positivo que ha generado la llegada de Inversión Extranjera Directa provocada por el fenómeno conocido como “nearshoring” o relocalización de cadenas productivas. Un ejemplo de ello es que, en respuesta a la creciente demanda para alquilar naves industriales en México, los fideicomisos de inversión en bienes raíces han levantado capital por 13,295 mdp en la Bolsa Mexicana de Valores en los últimos nueve meses. Los efectos “serán paulatinos y se notarán entre 2024 y 2025”, según lo comentó Alejandrina Salcedo, directora general de Investigación Económica del Banco de México, pues cuatro de cada 10 empresarios consultados aseguraron que se estaban viendo beneficiadas.
Desafortunadamente, este escenario enfrenta una dinámica compleja. Para 2023, la demanda eléctrica máxima prevista para el Sistema Interconectado Nacional era de 49,495 megawatts; no obstante, se ha registrado una demanda superior de acuerdo con los registros del Centro Nacional de Control de Energía. De hecho, el miércoles 21 de junio, en las horas previas al inicio del solsticio de verano boreal, se registró la mayor demanda histórica de electricidad en el país: 53,000 megawatts requeridos por los consumidores que fueron despachados, lo que provocó que el margen de reserva se redujera hasta el mínimo operativo de 6%. La onda de calor que azotó la mayor parte del país provocó apagones, por lo que empresarios, funcionarios y comerciantes demandaron un plan que mitigue los daños económicos y sociales.
El Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) negó que existiera racionamiento en el suministro de energía eléctrica en el país y aseguró que “el Sistema Eléctrico Nacional (SEN) está transitando por la temporada de máximo consumo eléctrico, y para ello el Cenace está preparado, por lo que no representa una situación crítica”. La CFE, por su parte, aseguró que no había riesgos de fallas en el suministro.
Desafortunadamente, la realidad contradijo los dichos de las autoridades, toda vez que en distintas ciudades del norte, sur y occidente del país hubo cortes de luz, en localidades de Piedras Negras, Coahuila; en municipios como Coatzacoalcos, Nanchital, Cosoleacaque y Sayula de Alemán, en Veracruz. En protesta por la falta de luz, hubo movilizaciones sociales en Monterrey y Guadalupe en Nuevo León, donde se presentaron bloqueos en diversas avenidas. En colonias de Cancún, Quintana Roo, en hoteles y centros turísticos, se presentaron apagones diarios que en ocasiones dejaron a los turistas y lugareños sin aire acondicionado y agua dulce. De acuerdo con estimaciones de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec), los apagones reportados en diversas zonas del país afectaron en 50% promedio las ventas de tienditas en todo el país.
