1) Estancamiento. Según reportes recientes del Inegi, el desempeño negativo de la industria y los servicios podría provocar una importante contracción de la economía. En este mismo sentido, el Indicador Global de la Actividad Económica publicado por el mismo organismo, confirmó ya una contracción de la economía mexicana de 0.2% en su comparación mensual.
La consultora Franklin Templeton publicó recientemente que, en los próximos 12 meses existe 70% de probabilidad de que haya una recesión leve en nuestro país. Moody´s prevé que la caída en la economía tendrá una mucho mayor profundidad a mediados del año siguiente. La calificadora ha advertido que, en 2023, México podría enfrentar una “fuerte recesión”, provocada principalmente por la desaceleración económica en Estados Unidos, mayores niveles de inflación y tasas de interés.
2) Inflación alimentaria. Hace unos días, el incremento de precios alcanzó su nivel más alto desde 1998, tras superar el 8.0% y colocarse en 8.16%. El subsidio que ha implementado el gobierno de López Obrador ha garantizado que los precios de combustibles para transporte de mercancías y personas se mantengan sin modificaciones. Sin embargo, el uso del combustible para fines de producción agrícola y pecuaria (que no reciben subsidio alguno) ha provocado que el impacto de los costos relacionados con la producción rural, se traslade a incrementos en los precios que pagan los consumidores.
En la primera mitad del mes de julio, el incremento en el costo de alimentos, bebidas y tabaco fue de 13.59% en comparación con el mismo período del año pasado. Esto casi duplica la inflación general. Peor aún, la Secretaría de Economía, en lo que va del sexenio, el precio de la tortilla ha aumentado 44.74%, al pasar de 14.33 pesos en diciembre del 2018 a 20.74 en junio de 2022. Otro producto que ha sufrido de graves incrementos es el huevo, el cual ha aumentado su precio en alrededor de un 57.14%.
3) Sequía. Por último, ante la crisis de agua que hoy se vive en varias entidades de la República, la Conagua reveló que un 79.01% del país se encontró bajo algún tipo de afectación que va desde anormalmente seco a sequía excepcional. Esta misma dependencia declaró que ante el inicio de una nueva emergencia por falta de agua en algunos estados del norte afecta a más del 90% de su territorio, por lo que se podrán usar las concesiones de privados para redistribuirlos hacia el abasto doméstico.