Publicidad
Publicidad

#ColumnaInvitada | El costo de la brecha

Es momento de que dejemos de ver temas como “de mujeres”, para permitir que salgan a la luz pública y que entendamos que nos compete a todas y todos por igual.
mié 15 septiembre 2021 06:30 AM
Menstruar no es un lujo.jpeg
Diputadas en demanda de eliminar el IVA a productos de higiene menstrual.

Es común que, entre hombres, ignoremos el hecho de que todos los días al menos una mujer de nuestro círculo cercano se encuentra en su periodo menstrual. Es común que desconozcamos, las implicaciones que este hecho tiene en su vida cotidiana y, ya sea por desinformación, o por desinterés, ni siquiera nos demos a la tarea de investigar qué podríamos hacer para que sea un proceso un poco menos estresante.

Traigo este tema a la mesa porque debe dejar de ser visto como “de mujeres”, para salir a la luz pública y que entendamos de una vez que nos compete a todas y todos por igual. Ahora que se debate el tema de la eliminación del IVA a los productos de gestión menstrual, es buen momento para entender cómo es que nos afecta como sociedad.

Publicidad

De acuerdo con datos de la Secretaría de Educación Pública de 2013 –los más recientes disponibles–, el 87.2% de los planteles contaba con sanitarios y en el 69% había agua potable, esto significa condiciones insalubres para las estudiantes que cada mes se enfrentan a la misma realidad.

El 28 de abril de 2021 el pleno de San Lázaro votó a favor de reformar la Ley General de Educación para que las autoridades educativas y de salud estatales brinden, por obligación, productos de gestión menstrual de manera gratuita en las primarias, secundarias y preparatorias.

Cinco meses han pasado, y esta ley no ha entrado en vigor. La iniciativa fue turnada al Senado de la República, donde todavía debe ser discutida y votada. Además, el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2022, plantea una reducción del Impuesto al Valor Agregado (IVA) a tasa cero, lo que beneficiaría ampliamente a las mujeres más desfavorecidas de la población.

De acuerdo con algunas estimaciones, una familia donde dos personas requieran de productos de gestión menstrual, el gasto podría ascender hasta los 300 pesos mensuales, de los cuales, casi 50 pesos se van al erario.

Especialmente en las regiones más apartadas de provincia, una niña puede perder hasta una semana de clases al mes, debido a la carencia de estos productos, y de la infraestructura sanitaria básica que ya hemos comentado anteriormente, lo que amplía gravemente la brecha educativa con sus pares varones.

Publicidad

Es por esto que, como sociedad, debemos preocuparnos y ocuparnos de resolver estos asuntos que, aunque no lo parezca, nos impactan directa o indirectamente.

De acuerdo con algunas personas consultadas por este comunicador, las alternativas como toallas de tela o copas menstruales se vuelven imprácticas dentro de un estilo de vida agitado, como el que viven miles de mujeres a diario en las principales urbes, por lo que el gasto se incrementa más o menos, dependiendo de cada persona menstruante.

Es momento, ya, de que el Legislativo avale estas reformas, y dejen exentos de impuestos productos que son de necesidad básica, y que llegan a desbalancear un presupuesto familiar.

_________________

Nota del editor: El autor es comunicador.

Las opiniones de este artículo son responsabilidad única de la autora.

Publicidad

Newsletter

Los hechos que a la sociedad mexicana nos interesan.

Publicidad

MGID recomienda

Publicidad