Mientras Clara Luz (con complicaciones hasta para leer) tiene que salir a mentir, ¡perdón! a decir, que no estuvo involucrada con Keith Raniere, acusado y llevado a prisión por tráfico sexual, delincuencia organizada, extorsión y abuso sexual de menores, Adrián ha puesto temas en la mesa que afectan de manera directa a los nuevoleoneses, como recuperar o sustituir los programas sociales eliminados por el gobierno federal, la implementación de la tarjeta “Mujer Fuerte” para las jefas de familia en situación vulnerables (programa que hizo en 2015 cuando gobernó la capital) y hasta retomar los derechos para extraer agua del Río Pánuco.
Por otro lado, mientras que Samuel anda clavado en el Instagram y las redes sociales, Adrián de plano dijo que “es infantil abandonar el pacto fiscal” ya que afectaría a las empresas, la población y desde luego el comercio del estado.
“Lo que sí tenemos que hacer es una modificación a este convenio y puntos decimales que le movamos a este convenio, en definitiva, le va a ayudar enormemente al Estado, pero, también tenemos que empezar a ser más eficientes en la capacidad de gestión, en el fortalecimiento de la administración pública y así le vamos a sacar un gran provecho al presupuesto”, señaló el candidato a la gubernatura por la coalición Va Fuerte por Nuevo León a El Financiero.
Las ocurrencias de Samuel García lo exhiben no solo como alguien a quien no se puede tomar en serio, sino que ni sus 500 doctorados hacen que haga una solo propuesta viable para su estado.
¡En una de esas hay que decirle que se asome y recorra la entidad, capaz que se da cuenta que no se le puede poner filtros ni hashtag a la inseguridad y la pobreza! ¿Será que sabe que San Pedro Garza no es Nuevo León?