El resultado del fracaso
Juan Martín Pérez, director de la Red por los Derechos de la Infancia en México (REDIM), considera que la guerra fallida contra el narco es la consecuencia de que los niños estén siendo involucrados dentro de la vorágine violenta que se suscita en todo el país, donde durante los últimos 13 años todas las estrategias del gobierno contra la criminalidad han fracasado; en un país donde hay más de 13 millones de armas circulando.
Más allá de buscar protagonizar, para el REDIM los anuncios de reclutamiento infantil en las CRAC son un acto desesperado para llamar la atención del Estado Mexicano. Pues existe un hambre de justicia entre los menores, una búsqueda de venganza por la muerte de sus padres o familiares.
Para las CRAC es mejor que los niños estén siendo adiestrados y enseñados a defenderse, en lugar de ser cautivados por el narcotráfico, pues hay cientos de niños en el estado de Guerrero, que participan directamente en alguna actividad ilícita con alguno de los grupos criminales, quienes pagan por sus servicios con cantidades de dinero muy pequeñas o en especie, con droga.
Niños guerrerenses aprenden a utilizar armas para defenderse del narcotrafico
Para el gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo Flores, la solución de este flagelo es regresar a los niños a los salones de clases: “Necesitamos la educación, que los niños vuelvan a la escuela”, dijo. Sin embargo, la situación, luego de la masacre, hizo que los maestros huyeran del poblado, y hasta la fecha no les han enviado a nuevos maestros o restituido a los que tenían.
Ha pasado casi un mes desde que el grupo criminal de “Los Ardillos” creó un infierno en la zona y no hay avances, en cuanto a detenidos o en la investigación de los asesinatos perpetuados. Los niños no han recibido atención psicológica, no hay apoyos económicos por parte de ninguna instancia de gobierno. Los niños de la montaña siguen con sus paliacates y sus rifles, aprendiendo a disparar y estar alerta por si en algún momento sucede un enfrentamiento donde tengan que poner en riesgo sus vidas.