Publicidad
Publicidad

#ColaboradorInvitado | El presidente y la moral en sus conferencias matutinas

Aunque la mañanera es un evento oficial, los mensajes del presidente suelen asociarse con la moralidad: en 253 conferencias, AMLO ha mencionado 294 veces la palabra “moral”.
mar 03 diciembre 2019 05:55 AM
conferencias-matutinas.jpeg
Señalamientos. La moralidad es uno de los conceptos más mencionados por el presidente López Obrador en sus conferencias matutinas.

El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) es el único jefe de Estado o de Gobierno en la historia que lleva a cabo conferencias de prensa diariamente. Desde el pasado 3 de diciembre de 2018, cuando AMLO comenzó a dar sus conferencias de prensa, ninguna mandataria o mandatario del mundo ha optado por utilizar a la conferencia de prensa diaria como herramienta de comunicación: la sobreexposición frente a los medios de comunicación, y el riesgo permanente de cometer un error en vivo frente a los medios de comunicación convocados, son motivos suficientes para evadirlas.

Al cierre del primer año de gobierno de AMLO, de acuerdo con las cifras de SPIN ( spintcp.com/conferenciapresidente ) se llevaron a cabo 252 conferencias de lunes a viernes. La duración promedio de las conferencias es de 95 minutos, contrastando el inicio del gobierno (70 minutos promedio en diciembre de 2018) con el final del primer año (110 minutos en noviembre de 2019).

Publicidad

Durante las conferencias, AMLO y su gabinete exponen diversos temas, llevan a cabo ceremonias protocolarias y toman preguntas de la prensa, especialmente de quienes se sientan en la primera fila (56 por ciento) y en la segunda fila (23 por ciento). A pesar de que los encargados de comunicación de Presidencia de la República enfatizan que se sientan adelante quienes llegan temprano, la mayoría de las preguntas favorece a periodistas de medios “digitales” (39 por ciento) en comparación con periodistas de la prensa escrita (25 por ciento), de la radio (14 por ciento) y de la televisión (12 por ciento). Contrario a lo que se observa, por ejemplo, en Estados Unidos, en donde la prensa con mayor audiencia es la que tiene permanentemente los lugares preferenciales (primera fila) en la sala de prensa de la Casa Blanca, AMLO opta por contestar preguntas de periodistas de medios digitales quienes, incluso en las conferencias fuera de Palacio Nacional, en los cuarteles militares en los estados, ocupan también los lugares de la primera fila.

Recomendamos: La mañanera borró la estrategia

Al contestar las preguntas de ciertos medios “digitales”, AMLO ocupa mayor tiempo que con los medios tradicionales, pues el propio AMLO ha mencionado que requiere contextualizar su respuesta, comparando su gobierno con los de las pasadas seis administraciones (periodo que denomina neoliberal) y, sobre todo, con tres momentos fundamentales en la historia de México: la Independencia, la Reforma y la Revolución Mexicana. AMLO gusta de hacer una pausa siempre para elogiar a Benito Juárez, su modelo y aspiración, llegando a decir que él mismo es “Juárez gobernando”. En sus respuestas, AMLO ha utilizado hasta 45 minutos para contestarle solamente a uno de los periodistas de medios “digitales”, sentado regularmente en primera fila.

Publicidad

A pesar de que la conferencia de prensa es un evento oficial, llevado a cabo en Palacio Nacional, convocado por el presidente y con la utilización de recursos públicos, los mensajes del presidente suelen asociarse con la moralidad: durante las 253 primeras conferencias, AMLO ha mencionado 294 veces “moral” y 32 veces “inmoral”, incluyendo la presentación de su más reciente libro “Hacia una economía moral”, en el que narra su punto de vista sobre el modelo económico que debe imperar en México y que asocia al éxito de su gobierno, que ha denominado “La Cuarta Transformación”.

En principio, no habría nada irregular con las menciones recurrentes de AMLO sobre la moralidad si no estuvieran insertas en contextos que implican subjetividad a evaluaciones y juicios desde una conferencia de prensa. Es decir, AMLO ha llegado a calificar comportamientos de ciertos servidores públicos como “legales pero inmorales”, dejando de lado el enfoque de igualdad ante la ley y resaltando los juicios de valor que cada quien pueda hacer sobre lo que se discuta, empezando por los del propio presidente de la República.

Más del tema: AMLO presenta su nuevo libro | #EnSegundos

Así, AMLO señala públicamente, desde la tribuna con mayor autoridad en el país, las acciones que considera morales o inmorales, sin necesariamente tomar en cuenta lo que está dentro o fuera del marco de la ley.

Cuando la visión de la legalidad y de la economía se torna subjetiva (desde el punto de vista de la moral), entonces la incertidumbre del actuar de la autoridad se vuelve la regla, lo que infunde escepticismo o incluso temor.

No solo la evaluación de las calificadoras o de organismos financieros internacionales ha descontado ya el enfoque del gobierno de AMLO: diversas encuestas publicadas muestran una caída en la aprobación de quien ha sido el presidente electo con el mayor apoyo popular en décadas.

_________________

Nota del editor: las opiniones de este artículo son responsabilidad única del autor.

Publicidad

Newsletter

Los hechos que a la sociedad mexicana nos interesan.

Publicidad

MGID recomienda

Publicidad