Crimen acentúa escalada violenta: incendios con drones, bloqueos, carros bomba
Desde el gobierno de Calderón, los cárteles han recurrido a la tecnología y el armamento de alto poder para intimidar autoridades, infundir miedo y atentar contra la población.
Miembros del crimen organizado tienen en su poder armas de alto calibre como Barrets calibre 50. (Foto: Brian Snyder/Reuters)
Lidia Arista
La narcoviolencia extrema que nunca se fue, se ha vuelto a acentuar en México.
A partir de la llamada guerra contra el narco en 2006, la violencia se radicalizó. Integrantes de cárteles y organizaciones criminales han utilizado armamento de alto calibre y tecnología para infundir temor en la población y atacar a comunidades, como recientemente sucedió con la explosión de dos coches bomba en Guanajuato.
Uno de los primeros episodios de violencia que estremeció a México se registró en Michoacán en 2008. La noche del 15 de septiembre, durante el festejo por la Independencia de México, se detonaron dos granadas de fragmentación que dejaron ocho personas muertas y alrededor de 130 personas heridas. Ese ataque fue atribuido al cártel de La Familia Michoacana.
A partir de ese año, el país ha tenido diversos episodios de violencia, también durante el arranque del sexenio de Claudia Sheinbaum.
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Uso de drones
El crimen organizado ha recurrido a la tecnología para realizar sus actividades ilícitas. Primero utilizaron drones para el contrabando de drogas, luego para realizar actividades de vigilancia y más tarde para atacar a a la población.
“Dentro de los recursos que los grupos utilizan para disputarse el territorio en la región frontera encontramos enfrentamientos generalizados recurrentes, uso de artefactos explosivos, uso de drones artillados, explosiones y quemas de vehículos. Ello impacta directamente en las posibilidades de movilidad de la población, además de someterla a un miedo constante e impedirle llevar a cabo sus actividades cotidianas”, refiere el informe realizado por organizaciones de la sociedad civil sobre la violencia en la región frontera de Chiapas.
Grupos criminales equipan drones con explosivos.(Foto: Juan José Estrada Serafín/Cuartoscuro )
El exsecretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval, informó que en Michoacán es una de las entidades donde más agresiones se han registrado con drones explosivos.
“Es el estado donde se han incrementado, hemos tenido el mayor número aquí, también uso de artefactos explosivos improvisados, si mal no recuerdo como 980 artefactos explosivos se han asegurado en el estado”, dijo el general en marzo de 2024.
El Código Penal Federal y la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos, establecen que el uso de drones en actividades delictivas es sancionado hasta con 40 años de prisión.
🔴 El uso de drones para actividades delictivas será sancionado con 40 años de prisión, según la reforma al Código Penal Federal y la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos. La ley se aplicará con rigor a quienes lancen explosivos, armas o sustancias peligrosas desde drones.… pic.twitter.com/8VQNMNxOmB
El crimen organizado utiliza cada vez armamento más sofisticado. Barrets calibre 50, fusiles calibre 5.56, armas largas AK-47 y AR-15, fusiles automáticos 5.56×45 milímetros, fusiles AK-47 conocidos como cuerno de chivo, son algunas de las armas en poder de los cárteles.
De acuerdo con la Secretaría de la Defensa Nacional, cada año ingresan alrededor de 200,000 armas de forma ilegal a México, de las cuales el 70% procede de Estados Unidos.
Las Barrets calibre 50 han sido utilizadas en ataques contra autoridades como sucedió en la agresión contra el exsecretario. de Seguridad capitalino, Omar García Harfuch.(Foto: Cuartoscuro)
Coches bomba
La explosión de artefactos en vehículos ocurrida la semana pasada en municipios de Guanajuato, conmocionó a México por el nivel de violencia al que nuevamente están recurriendo integrantes del crimen organizado.
Sin embargo, la explosión de coches bomba no es nueva en México. En junio de 2023, un vehículo de estas características bomba explotó en Celaya, Guanajuato, y dejó a cuatro integrantes de la Guardia Nacional heridos de gravedad.
De acuerdo con un artículo llamado “El carro de Buda. Una breve historia del coche bomba”, de Mike Davis, el uso de los vehñiculos de este tipo busca infundir temor entre la población.
“El carro bomba, como un producto de la era de la tecnología, tiene su propia historia de destrucción material, al causar la muerte de varias personas, buscando generar terror e incertidumbre, y su escenario ha sido la ciudad, es decir, los diferentes centros urbanos, localizados a lo largo del orbe”.
En Acámbaro y en Jerécuaro se registró la explosión de artefactos en vehículos.(Foto: Diego Costa Costa/Cuartoscuro.)
¿Narcoterrorismo?
El secretario de Seguridad Pública, Omar García Harfuch, rechazó -la semana pasada- que en México haya narcoterrorismo, luego de la escalada de violencia en las últimas semanas.
“En estas agresiones que hubo en Guanajuato, esto es por una disputa de territorio, esto es por droga. El terrorismo tiene tintes ideológicos, religiosos, etcétera. Aquí es una disputa de dos grupos delincuenciales para pelearse entre ellos y amedrentar a la autoridad, ya sea porque alguna autoridad local esté involucrada con algún otro grupo o porque la propia autoridad los está combatiendo. Es decir, no están disputando más que la venta de droga, la venta de hidrocarburo, son dos grupos delincuenciales, confrontándose entre ellos”, aseguró.
Sin embargo, desde la oposición, políticos como Marko Cortés, del PAN, han manifestado su postura por que haya cooperación internacional para enfrentar la violencia, que asegura, está desbordada.
“México se encuentra en un estado de alerta, con la violencia desbordada, con sucesos de narcoterrorismo en buena parte del país, pero que se atreven a negar, una presidenta que continúa lo mal hecho del gobierno de López Obrador y con imposiciones autoritarias a través del Congreso de la Unión, donde están coartando los derechos humanos”, dijo Cortés el 27 de octubre.
