Pegasus
El Ejército recurrió a Pegasus para intervenir la comunicación a miembros de Guerreros Unidos, familiares, elementos de seguridad pública y también del Ejército.
De acuerdo con el GIEI, había un Centro de Inteligencia desde que se identificó que se realizaban actividades de seguimiento e interceptación telefónica, aunque la Sedena rechazó que existía ese centro.
“El Comando Regional de Inteligencia Zona Norte Iguala, existía para septiembre de 2014 (alojado dentro del 27BI), y hacía labores de monitoreo, interceptación y registro de llamadas, pues existe registro de todo esto. El GIEI verificó directamente varios mensajes de este centro en la información que se posee donde había varias transcripciones, mensajes que contenían información de esta naturaleza, pero además ha realizado investigaciones que le permiten concluir que sí se hacían interceptaciones a través de medios como el programa Pegasus”, plantea el informe.
Quinto autobús
El GIEI insistió en la existencia de un quinto autobús, el cual fue tomado por 14 estudiantes y salió por la parte de atrás de la “Comercial Camionera del Sur”, por la carretera hacia Chilpancingo. En una breve parada, una mujer le entregó un paquete al chofer y después la unidad siguió su ruta hasta poco antes de llegar al Puente del Chipote.
“Desde el primer informe el GIEI señaló que debía indagarse si en ese autobús se trasladaban drogas, lo que podría haber actuado como desencadenante de las agresiones, explicar la intensidad del ataque en contra de los estudiantes, la potencia de fuego y el bloqueo de la salida de buses, incluyendo el del equipo de fútbol de los Avispones que salió poco más de una hora después por la misma carretera siendo atacado en Santa Teresa”, plantea el reporte.