El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que desconocía la enfermedad que padecía desde 2012 el ahora exembajador de México en Argentina, Ricardo Valero, que lo llevó este fin de semana a renunciar a su cargo.
“No se sabía (la condición del diplomático), es muy lamentable este caso, yo diría que hasta doloroso, yo le mando a Ricardo un abrazo y a su familia también”, comentó el mandatario federal al ser cuestionado sobre la salida de Valero.
Este domingo, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) informó que el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, aceptó la renuncia del diplomático quien fue señalado de haber robado un libro en octubre pasado y presumiblemente de un nuevo intento de robo el 11 de diciembre pasado en el aeropuerto cuando se disponía a volver a México, hechos que estarían relacionados con su condición.
De acuerdo con información médica del exembajador, difundida en el chat oficial de la cancillería, con la presunta autorización de la hija de Ricardo Valero, Florencia Valero, sus conductas inadecuadas podrían ser motivadas por un síndrome frontal que padece luego de haber sufrido un tumor cerebral en 2012.
Conoce más: El embajador de México en Argentina renuncia "por motivos de salud"
En una carta médica, firmada por la doctora del hospital Médica Sur Ana Luisa Sosa Ortiz con cédula profesional 501782 –cotejada en el Registro Nacional de Profesionistas– se explica que el exembajador fue intervenido quirúrgicamente por el neurocirujano Ramiro del Valle y que a partir del 2013 se identificaron en Ricardo Valero "alteraciones sutiles de memoria no progresiva".
El documento también detalla que la pérdida de tejido neuronal causada por el tumor y su extracción, así como por la "neurodegeneración asociada por la edad", ha causado una disminución de su tejido cerebral en el predominio frontal, que se ha agudizado en los últimos 18 meses.
Lee además: La SRE investiga al embajador de México en Argentina, acusado de robar un libro
“La evolución de síndrome frontal se expresa con impulsividad voluntaria y deterioro del juicio, lo que puede ocasionar francas alteraciones de la conducta aun cuando otras funciones cognitivas se realizan con aparente normalidad”, explica la misiva.
Además, destaca que acontecimientos recientes como el robo del libro en Buenos Aires, Argentina, frecuentes infracciones de tránsito en México, mal manejo de su tiempo y algunas dificultades en sus relaciones personales, pueden ser muestra de la reactivación del síndrome frontal.
