El presidente Andrés Manuel López Obrador puede presumir que termina su primer año con mejores niveles de aprobación que sus dos antecesores; en contraste, sus números de homicidios son los mayores en la historia.
En materia económica, el presidente López Obrador, aunque ha heredado una situación económica complicada por Enrique Peña Nieto, tiene un balance de estabilidad pero sin crecimiento. Logró que los indicadores de población en pobreza no salieran del rango, pero ciertamente se modificaron las pautas de medición.
En 10 indicadores, los tres presidentes presentan claroscuros.
