Un sistema de cuidados pendiente
A pesar del impacto negativo para las mujeres de la falta de establecimientos públicos de cuidado, la creación de un sistema de cuidados sigue pendiente en México. Una iniciativa de ley que contempla su formación espera su aprobación en el Senado desde 2020.
Al inicio de su administración, la presidenta Claudia Sheinbaum prometió que esto sería una prioridad en su gobierno y ha mostrado algunos avances. México suscribió el 15 de agosto, junto a otros países de América Latina, el Compromiso Tlatelolco. Es un acuerdo impulsado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) que compromete a los Estados miembro a garantizar una sociedad del cuidado justo de aquí a 2035.
“Invertir en cuidados no es un costo, es un catalizador para la igualdad, la transformación democrática y el desarrollo sostenible”, declaró Amina J. Mohammed, vicesecretaria general de las Naciones Unidas en la XVI Conferencia Regional sobre la Mujer de América Latina y el Caribe.
En este foro que se realizó en la Ciudad de México, donde se firmó el acuerdo, la Cepal estimó que México necesita invertir al menos 3% de su Producto Interno Bruto (PIB) para consolidar un sistema de cuidados.
En el marco de esa conferencia, la titular de la Secretaría de las Mujeres, Citlalli Hernández, presentó los avances del Anexo Transversal para la consolidación de una sociedad de cuidados. Este documento es un análisis de los recursos que el Gobierno de México destina a rubros relacionados con esta tarea.
Sin embargo, no difundió el monto estimado porque aseguró que en próximos días lo dará a conocer Sheinbaum. También acotó que la creación será progresiva y que la presidenta busca establecer qué sí se puede alcanzar durante su sexenio y qué deberá ser tarea de otras administraciones.
Esta hoja de ruta ha sido reconocida, pero plantea dudas. Por ahora no se detallan recursos específicos adicionales para la consolidación del sistema de cuidados, al menos en 2026. Lo que estima son los recursos que el gobierno ya invierte en acciones y programas que asegura son de cuidado, y los que incluye algunos programas sociales, como las becas y la pensión para mujeres de 60 a 64 años.
“El Gobierno de México ya invierte en acciones específicas destinadas a cuidados”, declaró la secretaria de las Mujeres.
A decir de Alexandra Haas, directora ejecutiva de Oxfam México, el anexo es un avance significativo porque implica la definición conceptual de lo que un gobierno considera cuidados. Sin embargo, considera que debe analizarse con frecuencia.
“Todo el tiempo estar revisando que no estemos sobreestimando, que tampoco estemos subinvirtiendo, que tengamos una mirada progresiva, hacia adelante”, señala.
Además, los programas sociales tienen otras metas y población objetiva, además de que han perdido progresividad.
“Las transferencias gubernamentales ya no parece que tuvieran tanto un enfoque de las poblaciones vulnerables. Entonces, la gente que está en el menor decil, con menores ingresos, no recibe más”, apunta Samantha Contreras, la especialista de México, ¿Cómo vamos?
Por ello, Paulina Gutiérrez, directora operativa de Acción Ciudadana Frente a la Pobreza, explica que para avanzar más rápido en el combate a la pobreza es necesario continuar con la creación de empleos de calidad, con remuneración suficiente y con acciones que promuevan la inclusión de las mujeres.
“Es el ingreso laboral el principal motor de sacar a la gente de la pobreza”, subraya. “Necesitamos potenciar la incorporación a la fuerza productiva de mujeres que, lo hemos dicho, por estar realizando labores de cuidado sin remuneración están no disponibles para la economía. Las tenemos que integrar a la economía, pero también a los jóvenes que hoy están en una condición de exclusión”, plantea.