En sesión pública, los magistrados también confirmaron el modelo de boletas electorales para magistraturas de circuito y personas juzgadoras de distrito que se usarán en las elecciones judiciales.
Previamente, ya había sido confirmado por el Tribunal el modelo para las papeletas para la elección de ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), magistrados electorales y del Tribunal de Disciplina Judicial.
En la discusión, sin embargo, cuatro de cinco magistrados –sólo Felipe de la Mata no se pronunció al respecto-reconocieron que las boletas serán “complejas” y que podrían dar lugar a confusiones, por lo que se requieren mecanismos para hacerlas más claras para el electorado.
Por mayoría, se confirmó el tipo de boleta que se empleará.
“El diseño estará a prueba”, admitió la magistrada presidenta Mónica Soto, "podría haber mejores, pero este fue avalado por ocho consejeros que dedicaron meses, eso da confianza de que fue el mejor”, añadió.
La magistrada Janine Otálora propuso revocar el acuerdo del INE sobre el modelo de boletas e instruir a que se añada un “Instructivo o manual”, pues el diseño podría inducir a confusión.
El magistrado Reyes Rodríguez recordó que, si bien la Constitución indica que los nombres de deben aparecer alfabéticamente y eso hizo el INE, bien pudieron ponerse bloques de candidatos, según especialidad y dentro de ese listado hacerse alfabéticamente.
Por el contrario, dijo, aparecerán alfabéticamente todos, pero las especialidades dispersas en toda la papeleta.
Además, se asignará un número para ser colocado en un recuadro y no una marca en los nombres, todo lo cual harña más compleja la votación, por lo que propuso revocar y que el INE revalore el modelo, lo que no se aceptó.
El magistrado Felipe Alfredo Fuentes sostuvo que otro diseño de boleta, por ejemplo para consignar el nombre de preferencia del electoral, implicaría más tiempo en casilla, por lo que el diseño avalado los reducirá.
Los magistrados también declararon improcedentes más juicios ciudadanos promovidos por aspirantes a contender en la elección judicial que se quedaron fuera del sorteo pese a haber sido considerados idóneos, pues por error del Poder Legislativo sus nombres no se incluyeron en la tómbola o se les sorteó en entidades distintas.