Quienes firmaron la carta abierta expusieron que, además, el Servicio Informativo del Sistema Público de Radiodifusión del Estado mexicano difundió un video para exhibir el rostro de la periodista “como si fuera una criminal”.
“Ambos casos surgieron a raíz de un mensaje que ella envió a la Oficina de la Presidencia con el fin de dar el derecho de réplica al Jefe del Ejecutivo para responder a diversas acusaciones lanzadas en su contra. Sin embargo, el presidente empleó su tribuna para atacar a la corresponsal, reiterando el patrón de acoso y descalificación a periodistas que ha caracterizado los cinco años de su gobierno”, expusieron en la carta.
Los actos de hostigamiento, encabezados por López Obrador, han sido copiados a nivel local por gobernadores estatales, municipales y hasta por otros funcionarios públicos en un contexto en que la violencia contra las personas periodistas se agudiza.
“La tasa de periodistas en México, la más alta del mundo fuera de zonas de guerra a lo largo de las dos últimas décadas, no ha bajado durante el sexenio actual. La tasa de amenazas y agresiones ha subido”, expusieron.
Un reciente informe de la organización civil Artículo 19 sobre la violencia contra periodistas documentó 561 agresiones en 2023 contra la prensa, lo que significa que en México, en promedio, se agrede cada 16 horas a una persona periodista o medio de comunicación en el marco del ejercicio de su labor.
“Según la documentación de organizaciones internacionales sobre libertad de expresión, fuera de Israel y los territorios ocupados de Palestina, con los asesinatos aquí registrados, se seguiría colocando a México como uno de los países más letales para ejercer el periodismo en el año 2023”, advirtió.