Tras negar el secuestro de ocho mujeres colombianas que fueron reportadas como desaparecidas en Tabasco, el subsecretario de Seguridad Pública, Luis Rodríguez Bucio, informó que siete de ellas serán deportadas a su país de origen por ingresar a México como turistas y realizar actividades económicas sin permiso.
Solo una de ellas, identificada como “Xiomara”, permanecerá en México en calidad de refugiada.
El funcionario presentó en la conferencia matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador una relatoría de hechos sobre el presunto secuestro de las jóvenes.
Detalló que el Consulado General de Colombia en Cancún presentó el 12 de enero una denuncia ante la Fiscalía General del Estado de Tabasco por la desaparición de ocho colombianas, que el 5 de enero acudieron a una fiesta en el municipio de Cárdenas.
La fiscalía local abrió una carpeta de investigación y obtuvo información de llamadas telefónicas que las mujeres hicieron a sus familias.
Según un audio de esas conversaciones, difundido en medios de comunicación, una de las jóvenes dijo a sus familiares que rezaran por ella porque un grupo criminal las había despojado de sus celulares y dio instrucciones sobre un seguro a utilizar si algo le sucedía.
Pero el subsecretario minimizó la llamada al asegurar que la mujer la hizo bajo “los influjos del alcohol y sentimental”.
El 13 de enero, la Fiscalía de Tabasco y la Guardia Nacional llevaron a cabo operativos de búsqueda y por la tarde ubicaron a las ocho mujeres en el Motel Plaza Tabasco, ubicado en la carretera de Cárdenas a Villahermosa.
Las jóvenes fueron trasladadas a la fiscalía estatal, donde, según el subsecretario de Seguridad, declararon dedicarse al servicio de acompañamiento y ser contratadas para una fiesta privada mediante un chat de Whatsapp.
Negaron haber sido secuestradas o retenidas en contra de su voluntad”,
“Al manifestar no haber sido víctimas de un delito, la Fiscalía de Tabasco les recabó solamente una entrevista y posteriormente las puso a disposición del Instituto Nacional de Migración por tratarse de personas extranjeras”, agregó.
Rodríguez Bucio expuso que las colombianas dijeron que entraron al país de manera legal y permanecieron en Cárdenas, Tabasco, por su voluntad.
De una de ellas no hay registro de su ingreso y a seis ya se les venció el permiso para estar en México, por lo que estas siete mujeres serán deportadas a Colombia.
“Ha iniciado el proceso del retorno asistido a su país de origen por falsear su declaración de ingreso a México como turistas y realizar actividades remuneradas”, señaló.
Solo una de las colombianas, identificada como “Xiomara”, permanecerá en México en calidad de refugiada.
Mientras se concreta la deportación de las jóvenes, que ahora están en las instalaciones migratorias de Villahermosa, Tabasco, se les proporcionarán medidas de protección y resguardo y la fiscalía estatal continuará con las investigaciones.
