Trabajadores descontentos
Sin embargo, trabajadores de clínicas y hospitales de la Ciudad de México se han opuesto a ser trasladados al IMSS-Bienestar porque, acusan, las condiciones laborales empeorarían para ellos y ellas. Desde entonces, se han manifestado para que las autoridades atiendan sus reclamos.
La Unión Nacional de Enfermería Mexicana (UNEM), por ejemplo, ha denunciado que el nuevo modelo de salud del IMSS-Bienestar contempla un mismo salario para las enfermeras, sin considerar si son auxiliares, tienen licenciatura o estudios de posgrado. Esto, asegura la asociación, limita su crecimiento profesional y el pago de salarios dignos y acordes a sus conocimientos y experiencia.
Según la organización, antes, para una enfermera auxiliar, había un salario global integrado mensual de 19,695 pesos a 21,280 pesos. Con IMSS-Bienestar se propone un sueldo de 20,388 pesos. Mientras que para las enfermeras generales había tres categorías y podían percibir entre 19,895 pesos y 28,935 pesos. El nuevo organismo plantea un salario de 23,498 pesos. El nivel más alto es el de las enfermeras especialistas, con un salario de entre 24,910 pesos hasta 31,621 pesos; pero el IMSS-Bienestar lo fijó en 25,229 pesos.
Otros trabajadores han señalado que con el traspaso se pretende considerar a los profesionales de la salud capitalinos de nuevo ingreso y no respetar su sede laboral ni sus horarios.
“El convenio no lo conocemos, los sueldos, los tabuladores, las prestaciones. Toda esa información no se nos ha dado”, sostuvo Raquel López, trabajadora social del Hospital General de Balbuena e integrante del Movimiento Galeno Salud Independiente.