“El Poder Ejecutivo busca despojarnos de las políticas públicas anticorrupción más importantes. Esta iniciativa pretende borrar 10 años de lucha social para satisfacer a un gobierno que centraliza el poder en el Ejecutivo”, dijo en conferencia de prensa.
México debe apostar por una lucha contra la corrupción independiente, que no sea política y que no señale solo a los adversarios, mencionó Dalia Toledo, directora de Finanzas Públicas y Políticas Anticorrupción en Ethos. “Y eso requiere instituciones sólidas y apartidistas”, demandó.
La iniciativa que el presidente Andrés Manuel López Obrador envió a la Cámara de Diputados para acabar con la Secretaría Ejecutiva del Sistema Nacional Anticorrupción (SESNA) es un retroceso y atenta contra los derechos, la Constitución y los acuerdos internacionales que ha suscrito México, indicaron.
Además, su eliminación obstaculizaría la rendición de cuentas de las 6,900 instituciones públicas de los tres poderes y niveles de gobierno que conectan información a través de ese órgano, advirtió el secretario técnico de la SESNA, Roberto Moreno.
Aunque el presidente Andrés Manuel López Obrador ha argumentado que la SESNA es costosa y duplica funciones, ha logrado ahorros por 1,700 millones de pesos, sostuvo.
