En 2023 menos personas adultas dedican tiempo a la lectura. Este año, 68.5% de la población de 18 años y más se considera lectora, el porcentaje más bajo de los últimos siete años, según datos del Inegi.
La disminución de las personas que leen fue de 12.3 puntos porcentuales frente a 2016, cuando 80.8% dijo leer alguno de los materiales considerados por el Módulo sobre Lectura (Molec) del Instituto Nacional de Geografía y Estadística.
La disminución de personas lectoras es gradual con la edad. Mientras que ocho de cada 10 jóvenes de 18 a 34 años leen, en el grupo de 65 años y más sólo leen seis de cada 10.
En promedio, las personas lectoras dedican 42 minutos a una sesión continua de lectura y el año pasado leyeron 3.4 libros, una disminución en comparación con 2022, cuando la media de lectura fue de 3.9 libros en los últimos 12 meses.
Sin embargo, sólo 55.1% de la gente lectora aseguró comprender la mayor parte del texto. Apenas 27.1% comprende todo lo que lee; 14.2% la mitad y 3.5% poco de lo que lee.
Lo que más leen las personas adultas son libros (40.8%) y páginas de internet, foros o blogs (37.7%). Entre 2016 y 2023, la población lectora de periódicos y revistas disminuyó 28.1 y 17.9 puntos porcentuales, respectivamente.
La población lee, sobre todo, por entretenimiento (44.6%) y por trabajo, estudio o cultura general, en segundo lugar. Pero también lee por motivos religiosos.
La lectura de los libros en formato digital aumentó 13.8 puntos porcentuales entre 2016 y 2023, al pasar de 7.3% de las personas que los leían a 21%.
“Este comportamiento inició durante la pandemia por la covid-19 y se mantiene hasta nuestros días”, apunta el Inegi.
La población no lectora declaró no haber recibido estímulos suficientes para la lectura durante la infancia. 83% dijo que no la llevaban a bibliotecas o librerías; 79.7% mencionó que sus padres o tutores no le leían y 60.7 % no tenía libros distintos a los de texto en casa.
Además, 60% expuso que sus maestros no la motivaban para visitar bibliotecas y a la mitad no le pedían leer en la escuela otros libros además de los de texto.
