La Comisión de Puntos Constitucionales pospuso por cuarta vez la dictaminación de reformas al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) para acotar sus atribuciones.
Esta noche sumaban 90 firmas en contra de una parte de las reformas al TEPJF, por lo que su dictaminación mañana y aprobación en el pleno es inminente, pues se requiere de al menos 168 diputados en contra para frenar las enmiendas, debido a que son de carácter constitucional.
Para que transiten se requiere mayoría calificada de dos terceras partes de los diputados presentes, es decir, el voto de cuando menos 334 legisladores en caso de que se presenten los 500.
Las firmas en contra pertenecen a diputados del Revolucionario Institucional (PRI), Morena, Partido del Trabajo y Verde (PVEM), a las que se suman 25 de Movimiento Ciudadano.
Sin embargo, la rebelión solamente se refiere a las reformas que limitan las facultades para obligar a los partidos políticos a cumplir con las acciones afirmativas que garantizan espacios de representación popular a minorías o sectores discriminados, como migrantes, mujeres, personas de la diversidad, con ascendencia indígena o afromexicana.
Además, se mantendrían los cambios que buscan acotar las atribuciones del TEPJF para interpretar la Constitución –al resolver por ejemplo acceso de militantes a cargos dirigentes o postulaciones– y tampoco podría ya resolver casos relacionados con el Congreso.
Las reformas consisten en modificar cuatro artículos de la Constitución para establecer que en sus sentencias el Tribunal deba limitarse a lo que establezca literalmente la Constitución y las leyes electorales, sin interpretarlas –como ha hecho para ampliar espacios para sectores minoritarios.
En el curso del día el presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales, Juan Ramiro Robledo, expuso que la propuesta original tendría cambios en atención a las preocupaciones, por ejemplo, se eliminaría la facultad exclusiva que se propone para que el Congreso legisle sobre medidas afirmativas, pero se mantendría la prohibición del Tribunal a proteger su cumplimiento vía interpretación del principio pro-persona.
La Comisión se declaró en sesión permanente esta noche, por lo que ya no será necesario que haya quórum para dictaminar. Se espera que se reúna mañana de nuevo.
En Morena la resistencia la encabezó la diputada Salma Luévano, quien advirtió que recortar las facultades del tribunal restringirá aún más el espacio político a las minorías.
“No vamos a permitirlo y por eso estamos aquí con acciones afirmativas, vamos en contra de una reforma regresiva… nos tienen limitados y no vamos a permitir que lo poco que nos han dado nos lo limiten”
“No vamos a permitir una acción regresiva… vamos a defender con uñas, con garras”, advirtió.
El diputado del Revolucionario Institucional (PRI) Sergio Peñaloza, de ascendencia afromexicana, se sumó al reclamo para evitar que se cierren espacios a las minorías.
La diputada de Morena Irma Juan Carlos afirmó que ya suman más de 90 diputados los que están en contra de limitar las atribuciones del Tribunal en materia de acciones afirmativas, pero por otro lado aseguró que estas ya están garantizadas por lo que vio innecesario que se detenga la reforma.
Es decir, la reforma mantendrá la intención de acotar al TEPJF, pues en sus sentencias tendrá que limitarse a la literalidad de la ley sin interpretar la Constitución en materia electoral, lo que hoy es su facultad.
En la discusión también incidió la sucesión presidencial, pues afines al canciller Marcelo Ebrard, como Emmanuel Reyes, de Morena, defendió que el TEPJF pueda proteger los derechos políticos de los ciudadanos y pidió definirse “de qué lado están, del lado de la regresión o de la justicia”, pues considera que la reforma es retrógrada.
