Mujeres: Hay avances, pero falta paridad en el ejercicio del poder

“Estamos en vías de consolidar nuestro acceso al poder de manera paritaria, en vías, pero no así en el ejercicio del poder, creo que ese es el gran reto. Todavía no ejercemos el poder de manera paritaria”, afirma Delgadillo García.

Hasta 1953 la vida de las mujeres se desarrollaba principalmente en el ámbito privado. El 17 de octubre se concedió a la mujer mexicana el derecho al voto y a ser votada a cargos de elección popular y a partir de ahí, poco a poco se ha ido abriendo brecha, la mayoría de las veces por acciones afirmativas o cuotas como sucedió con la paridad en el Poder Legislativo y en postulaciones a cargos de gubernatura.

Hoy por primera vez México tiene a nueve gobernadoras, a 250 diputadas de 500 legisladores federales, a 64 senadoras de 128, y a ocho secretarias de Estado, pero no siempre fue así. Las mujeres han tenido que pelear por ser incluidas, escuchadas y tomadas en cuenta en un país donde son mayoría.

La senadora de Acción Nacional, Kenia López Rabadán, recuerda que su incursión en la política fue justo para cubrir una cuota de representatividad y ningún día, en sus 25 años de experiencia en la política, ha tenido que dejar de demostrar su capacidad, lo que no suele suceder con los hombres.

“Las mujeres en el poder tenemos que demostrar todos los días que somos capaces. A un hombre le puedes tolerar que sea corrupto, incompetente, que no sepa dar un discurso, que no sepa leer, que no tenga capacidad de negociación... pero a una mujer se le cuestiona mucho más. Entonces nosotras estamos obligadas a demostrar nuestra capacidad”, plantea.

A pesar de haber dado pasos importantes en la paridad al acceso al poder, el legislativo es el único de los tres poderes en los que se ha logrado concretarlo. En el Poder Judicial aún son en su mayoría los hombres quienes ocupan los espacios, y en el Ejecutivo, si bien se tiene al primer gabinete con más mujeres en la historia de México, todavía no se cumple a plenitud con la paridad.

De los 15 grupos legislativos de la Cámara de Diputados y el Senado de la República solo dos mujeres coordinan a sus grupos: Buñuelos de la Torre está al frente del PT y Sasil de León, quien coordina al Partido Encuentro Social, ambas en la Cámara Alta.

“Hay mucho que caminar, incluso desde los espacios de toma de decisiones. En el Congreso de la Unión y sólo habemos dos mujeres que coordinamos nuestras respectivas bancadas. Si pretendemos avanzar respecto a la paridad también tenemos que buscar el empoderamiento y el poder tener un asiento en los lugares que se discute y se debate”, sostiene Bañuelos de la Torre.

Las reglas: de hombres para hombres

Además de demostrar su capacidad, las mujeres deben “jugar” con reglas impuestas por hombres. Ellas deben no solo desenvolverse en el ámbito público, sino en el privado, donde de manera natural se les ha impuesto la responsabilidad de ser cuidadoras. Esposos, hijos, padres, suelen estar bajo su cuidado, por lo que deben adaptar “sus tiempos” para cumplir con esas tareas, pero sin descuidar su cargo.

“Para mí el reto es como nosotras llegamos y transformamos la política, no solo de manera discursiva en sus formas. Feminizar la política para mí y para mí eso sería que la política se convierta en un espacio paritario es que tengamos nuevas reglas de juego por ejemplo la democratización de toma de decisiones en el partido, pero también en las empresas”, plantea Delgadillo.

La senadora sostiene que ahora a las mujeres ya se les invita a esas reuniones donde los hombres solían tomar decisiones, pero sigue habiendo una desventaja pues a veces esos encuentros suelen hacerse en horarios poco convenientes.

... Y las conquistas "penden de un hilo"

Así como cambios legislativos e interpretativos del Instituto Nacional Electoral (INE) han traído avances a la participación de las mujeres en la vida política, hoy también soplan aires de retroceso.

Dania Ravel, es una de las cinco mujeres que integran el Consejo General del INE y desde ese cargo le ha correspondido analizar y proponer temas clave para la paridad en el ejercicio del poder.

En 2019, por ejemplo, le tocó proponer que el derecho de las mujeres a participar en todos los espacios políticos en condiciones de igualdad aplicara también para el cargo de gubernaturas, lo que ocasionó resistencias en actores políticos hombres que impugnaron en el Tribunal Electoral.

Pero toda la discusión pública y las facultades interpretativa de los órgano electorales, llevaron a que en las elecciones del 2021, los partidos postularan a mujeres, en al menos, siete entidades. Lo que derivo en que hoy haya nueve gobernadoras al frente de los Poderes Ejecutivos de los estados.

No obstante, Ravel advirtió que los avances logrados en materia de paridad “penden de un hilo”.

“Los logros que tenemos hasta el momento penden de un hilo. Me parece que no podemos echar campanas al vuelo y decir que todo lo que tenemos en este momento va a permanecer”, alertó.

Lo anterior, luego de que esa facultad interpretativa del INE se quitó con el llamado “Plan B” de la reforma electoral impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador.

“En el Plan B se acota la libertad de interpretación tanto de la autoridad administrativa de la autoridad electoral como jurisdiccional. Para decirlo con todas sus letras sin la facultad de interpretación del INE nosotros no hubiéramos podido sacar las reglas para la paridad en las gubernaturas y no tendríamos este número histórico de gobernadoras que tenemos, nueve al mismo tiempo”, refiere.

El llamado "Plan B" electoral también determinó que el órgano electoral no puede pedir a los partidos que modifiquen sus documentos básicos, ello luego de que el INE había mandatado a las organizaciones políticas a garantizar la "paridad sustantiva" debido a que en Morena las precandidatas Susana Harp y Maki Ortiz interpusieron recursos al considerar que no encontraron condiciones de competencia igualitaria con hombres para acceder a la candidatura a las gubernaturas de Oaxaca y Tamaulipas en 2021.

“La paridad y los logros que tenemos hasta ese día están pendiendo de un hilo, no los tenemos asegurados. Tenemos que seguir cuidándolos, tenemos que ver quiénes llegan a los lugares donde se toman las decisiones y además no podemos permitir tener una legislación que sea regresiva en materia de derechos humanos”, afirma la consejera.

Aunque hay quienes aseguran que las mujeres “juntas ni difuntas”, son ellas quienes se alían para hacer frente a los retos que les impone la vida pública. Sin las mujeres, las conquistas en paridad de género no se hubieran concretado, considera Kenia López Rabadán.

Ahora uno desafío es que la paridad llegue a la vida cotidiana, pues es lo justo para el 51.2% de las mujeres que integran el México de 126 millones 14,024 habitantes.

“Las legisladoras y las mujeres que hoy ocupamos espacios de toma de decisiones ahora empezar a hablar de la paridad cotidiana, de la paridad que afecta a todas las mujeres que hoy no están en el ejercicio del poder público pero que representamos y que ellas como nosotras viven todos los días circunstancias de violencia y desigualdad por el simple hecho de ser mujeres en este país”, considera Verónica Delgadillo.