Juntos, ni en pintura. La división de los tres Poderes de la Unión fue hoy más evidente que nunca, pero no solo en el ejercicio del poder, sino también en la distancia de sus titulares.
En tan solo un año, los titulares del Poder Judicial y el Poder Legislativo pasaron de flanquear al presidente Andrés Manuel López Obrador a ser mandados a la orilla de la línea de honor.
Como cada 5 de febrero, las calles aledañas al Teatro de la República, en el Centro Histórico de Querétaro, fueron cerradas para recibir al presidente de la República, secretarios de Estado, gobernadores y legisladores federales, entre otros actores políticos.
Previo al acto conmemorativo, en el Palacio de la Corregidora se llevó a cabo el relanzamiento de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago), en la que fue designado por unanimidad el gobernador de Oaxaca, Salomón Jara Cruz, como presidente del organismo.
“Hay que estar muy cerca de Oaxaca”, dijo Andrés Manuel López Obrador antes de tomarse la foto oficial con los 28 gobernadores y la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México.
En el Teatro de la República comenzaban a llegar los invitados. El diputado Santiago Creel, presidente de la Cámara de Diputados, llegó acompañado de la diputada queretana Sonia Rocha y en el recinto saludó a otros panistas como el senador Alfredo Botello y la senadora con licencia, Guadalupe Murguía, hoy secretaria de Gobierno de Querétaro.
Comenzaban a llegar los gobernadores, quienes buscaban su lugar correspondiente. Mientras unos tomaban fotografías de la lista de los Constituyentes de 1917, otros enviaban mensajes desde su celular. Al tiempo que los mandatarios de Morena y el emecista Samuel García organizaban una “selfie”. Al gobernador de Morelos, Cuauhtémoc Blanco, se le veía solo.
Quien también aprovechó para tomarse “selfies” fue el vocero nacional del PRI, Paul Ospital Carrera, quien no perdió la oportunidad de tomarse una fotografía con Carlos Pozos, mejor conocido como “Lord Molécula”.
Faltaban minutos para el inicio del evento y el Teatro de la República aún no se llenaba.
–Presidente, tráete unos regidores para llenar –le decía Paul Ospital, en tono sarcástico, al alcalde de Amealco, René Mejía.
Funcionarios estatales fueron movidos de sus asientos para ocupar lugares más adelante, mientras que los asistentes de funcionarios federales eran invitados a sentarse en las últimas filas.
A las 10:30 horas arribó Andrés Manuel López Obrador al Teatro de la República, acompañado por el gobernador de Querétaro, Mauricio Kuri González.
A las afueras del recinto saludó al lábaro patrio y después al presidente del Senado, Alejandro Armenta Mier; a la ministra presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Norma Lucía Piña, y al presidente de la Cámara de Diputados, Santiago Creel.
Entraron al teatro. Piña y Creel ocuparon sus lugares, mientras López Obrador, Kuri y Armenta saludaron a algunas personalidades como Bernardo Bátiz y los exgobernadores de Querétaro, Enrique Burgos y Francisco Domínguez, con quienes incluso bromeó.
Entre una lluvia de aplausos, el presidente López Obrador ocupó su lugar flanqueado por el gobernador de Querétaro, Mauricio Kuri, el secretario de Gobernación, Adán Augusto López, y el secretario de la Defensa, Luis Crecencio Sandoval.
A dos lugares del primer mandatario se encontraba la ministra Norma Lucía Piña y después el diputado Santiago Creel; en el otro extremo, el presidente del Senado, Alejandro Armenta.
Al dar la bienvenida, el mandatario queretano, Mauricio Kuri, exhortó a blindar la supremacía constitucional y a lograr el consenso como medio para la concordia y la armonía social.
En un discurso de cerca de diez minutos, el gobernador panista reconoció al presidente López Obrador porque en los años recientes se ha hecho un esfuerzo sin precedente para distribuir apoyos a los más necesitados, cumpliendo –añadió– uno de los anhelos de la Constitución para alcanzar un México más justo, igualitario y solidario.
Tocó el turno de la ministra presidenta de la Corte, Norma Lucía Piña, quien puso especial énfasis en no perder de vista la independencia judicial, que –sostuvo– es pilar de la democracia.
“La independencia judicial no es un privilegio de los jueces, es el principio que garantiza una adecuada impartición de justicia para hacer efectivas las libertades y la igualdad de las y los mexicanos.
“La independencia judicial es la principal garantía de imparcialidad del Poder Judicial, siempre en beneficio de la sociedad”, señaló.
En su oportunidad, el presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Santiago Creel Miranda, rememoró diversos pasajes históricos que llevaron a la construcción de la Constitución de 1917.
Creel Miranda recordó que históricamente la falta de diálogo ha dado origen a guerras fratricidas, la muerte de líderes revolucionarios, masacres estudiantiles, conflictos postelectorales y acuerdos frustrados.
Con la mirada fija hacia el presidente López Obrador, el legislador panista aseguró que hoy “son tiempos de coincidir y son tiempos de dialogar”, por lo que llamó a rectificar el quehacer político para no repetir los errores del pasado.
Alejandro Armenta: las reformas son “motores jurídicos” para México
Al hacer uso de la voz, el presidente del Senado, el senador Alejandro Armenta, enlistó las reformas realizadas durante la actual administración federal, mismas que calificó como “motores jurídicos” que promueven el “humanismo mexicano” y que garantizan la prosperidad de México.
Durante su intervención, el legislador morenista criticó que en los discursos que le antecedieron se omitieron los logros alcanzados en materia legislativa durante el actual gobierno federal.
AMLO: “La Constitución no ha muerto”
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró que “la Constitución de 1917 no ha muerto, vive en la transformación del México libre, justo, igualitario, democrático y fraterno de nuestros días”.
Asimismo, el mandatario federal celebró y dijo sentirse orgulloso por la aprobación de reformas que destacan por su honestidad y humanismo, entre otras la Ley de Austeridad Republicana, la Ley de Extinción de Dominio, la eliminación del fuero para el presidente, la Consulta Popular y el hecho de establecer como derecho las pensiones de adultos mayores, personas con discapacidad y becas para estudiantes de todos los niveles educativos.
Justo al mediodía concluyó el acto protocolario con los Honores a la Bandera. El presidente López Obrador, acompañado por Mauricio Kuri, salió del recinto y bromeó con Enrique Burgos y Francisco Domínguez sobre la llegada del beisbol a Querétaro.
Los titulares del Poder Judicial y el Poder Legislativo salieron en dirección opuesta.
