Marcelo Ebrard, secretario de Relaciones Exteriores y una de las “corcholatas”, propuso debates entre aspirantes a la candidatura presidencial para que cada uno exponga su proyecto de país.
“Yo me imagino que el año entrante, después de mediados del año, pues habrá, organizará Morena debates para que cada quien presente lo que quiere hacer, conforme a lo que se espera y ahí ya podremos decir qué pensamos sobre temas específicos en dónde puede haber diferencias de criterio y puntos de vista”, afirmó al periodista de The New Yorker, Jon Lee Anderson, en el festival #Dromofest.
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A 20 meses de las elecciones de junio de 2024, Morena no ha mencionado si habrá algún tipo de debate entre sus aspirantes. Hasta ahora lo único fijado es el método mediante el cual se elegirá al que será su segundo abanderado: la encuesta.
De aprobarse, los debates incluirían a Marcelo Ebrard, a la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, y al secretario de Gobernación, Adán Augusto López, quienes han manifestado su intención por competir en el proceso interno.
Al canciller Marcelo Ebrard se le preguntó sobre si existe una distancia con la jefa de Gobierno a quien se le considera como “la que será la principal rival” para la presidencia en la contienda de junio de 2024.
“Yo la respeto a ella, la conozco desde hace mucho tiempo, fuimos compañeros en el gobierno de Andrés, eso fue 2002-2005. Adán también es un buen tipo”, explicó.
Sobre los enfrentamientos internos que se han registrado entre morenistas como el protagonizado entre el coordinador de los senadores de Morena, Ricardo Monreal, y la gobernadora de Campeche, Layda Sansores, el secretario consideró que son naturales, pero pidió a morena fijar reglas claras para evitar fracturas.
“En todas las competencias políticas vas a tener tensión porque te tienes que diferenciar, eso es natural en todos los procesos políticos. La cuestión es cómo evitas que eso llegue a una ruptura. ¿Cómo lo evitas? Morena lo que tiene que hacer es fijar con claridad reglas equitativas y respetuosas y hacerlas valer, es lo que yo pensaría. Si hay un ataque de alguien contra otro que está usando te habla el partido y te dice, esto no se puede, no puedes atacar a tu contrincante, fijar reglas y llevarlas a cabo”, afirmó.
Ebrard, quien ha sido varias veces mencionado por el presidente Andrés Manuel López Obrador como uno de los perfiles que puede sustituirlo, afirmó que en caso de llegar a la Presidencia de la República ofrecerá consolidar los logros y hacer los cambios que exijan la nueva realidad.
“Hay que consolidar, se logró un gran cambio, yo diría lo que estamos viviendo sí son cambios muy profundos, muy importantes, desde la relación entre poder y la sociedad, cuáles son los comportamientos permitidos, la presencia fuera de la corrupción que mucho tiempo dominó la vida pública. Todos esos son cambios relevantes, poner en el eje a los que no han tenido voz, todo eso no solo se tiene que mantener, se tiene consolidar”, dijo.
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“Muchos temas que ya echó a andar Andrés los tienes que consolidar adelante y lo que es cambio, tienes que estar preparado para ajustarte para una realidad que va a cambiar”, refirió.
Al hablar sobre sus fortalezas y defectos, el canciller destacó que la obsesión es una de sus debilidades, mientras que la dedicación es una de sus virtudes.
No hay plan de una administración militar
Al hablar sobre el rol que tienen las Fuerzas Armadas en el país, el canciller rechazó que la intención sea implementar un gobierno de orden militar.
“El presidente no está concibiendo una sustitución de la administración civil por la administración militar, eso no existe, yo estoy ahí todos los días, yo lo veo, eso no es así. Nosotros venimos de una lucha y así es la conformación de este movimiento democrática en favor de las libertades y derechos de las personas, no hay una idea de promover una reducción de poner en riesgos esas libertades”, señaló.
El canciller recordó que las Fuerzas Armadas llevan años participando en tareas de seguridad pública, pero fue en este gobierno cuando se les reguló el marco legal para su participación.
