Según el informe, los conflictos por la tierra y la minería estuvieron vinculados a dos tercios de los ataques letales que se registraron el año pasado en el país.
Además, alrededor de dos tercios de los asesinatos se concentraron en los estados de Oaxaca y Sonora, ambos con importantes inversiones mineras.
"En los últimos 10 años, México se ha convertido rápidamente en uno de los lugares más peligrosos para las personas defensoras de la tierra y del medio ambiente, con 154 casos documentados durante este período. La mayoría de los asesinatos (131) ocurrieron solo entre 2017 y 2021", detalla el informe.
Global Witness también apunta que en el país, las desapariciones forzadas también son frecuentes y al menos en 2021, se registraron 19 casos, los cuales fueron llevados a cabo por funcionarios estatales corruptos y grupos delictivos organizados.
El informe detalla que en septiembre de 2021, las autoridades descubrieron seis conjuntos de restos humanos cerca del territorio Yaqui en el sur de Sonora, México, y se presume que se trataría de algunos de los diez hombres desaparecidos en julio.