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“No somos iguales; mi gobierno confrontó a delincuencia”, revira Calderón a AMLO

“Yo no soy Felipe Calderón, aunque no les guste, no solo a sus más cercanos simpatizantes, sino a muchos que votaron por él”, dijo Andrés Manuel López Obrador en su conferencia de prensa.
mié 08 junio 2022 05:14 PM
lópez obrador felipe calderón
Andrés Manuel López Obrador y Felipe Calderón Hinojosa son viejos adversarios políticos. El primero ha acusado durante años al segundo de haber ganado la elección de 2006 con fraude.

El expresidente Felipe Calderón Hinojosa dijo hoy que su forma de gobernar y la de Andrés Manuel López Obrador, “bendito sea Dios”, no son iguales.

“En mi gobierno se combatió frontalmente a la delincuencia para proteger a las familias mexicanas. La seguridad y el Estado de Derecho fueron prioridad”, destacó Calderón Hinojosa en su cuenta de Twitter. “Nos esforzamos por recuperar cada pueblo y cada calle que estaban en manos del crimen. No, no somos iguales. Bendito sea Dios”, agregó.

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El mensaje del exmandatario mexicano se dio horas después de que el actual presidente de México retara a los senadores de Estados Unidos Ted Cruz y Marco Rubio a presentar pruebas , si las tienen, de que tiene algún vínculo con el crimen organizado y les aclaró que él no es Felipe Calderón, cuyo titular de la Secretaría de Seguridad, Genaro García Luna, está detenido en ese país acusado de proteger a un grupo de la delincuencia organizada.

“Le digo al señor Ted Cruz, Marco Rubio, pero también al otro, que presenten pruebas porque yo sí tengo pruebas de que al señor Ted Cruz, senador de Texas, de origen hispano, le han dado dinero los que están a favor de la fabricación de armas en Estados Unidos y que no haya ninguna prohibición para la venta, yo tengo las pruebas”, comentó López Obrador.

A través de sus redes sociales, el senador republicano de origen cubano, Marco Rubio, aseguró que López Obrador "ha entregado secciones de México a los cárteles de droga".

Por su parte, el presidente dijo que tiene pruebas de que senadores de Estados Unidos han recibido dinero de la Asociación Nacional del Rifle.

“El año pasado, creo que le dieron como 120,000 dólares, la fundación esta llamada rifle, la Asociación Nacional del Rifle, pero estos dos son republicanos, también un demócrata, el señor (Bob) Menéndez, que fue el que prácticamente amenazó de que no iba a votar a favor de las iniciativas del presidente Biden si se invitaba a todos los países de América a la llamada Cumbre de las Américas”, expuso.

Si bien ni Cruz ni Menéndez han hecho señalamientos de que el presidente López Obrador tiene relaciones con el crimen organizado, sí han criticado su gobierno.

El senador Ted Cruz ha manifestado su preocupación por los disturbios civiles en México y el rompimiento de la sociedad civil. “La ruptura del Estado de Derecho del otro lado de nuestra frontera sur supone un reto para la seguridad nacional y peligros para los Estados Unidos, en asuntos que van del tráfico de narcóticos a la inmigración ilegal”, dijo en febrero pasado durante su participación en el Comité de Relaciones Exteriores del Senado de Estados Unidos.

También ha criticado la situación de inseguridad que enfrentan los periodistas en México. “El clima actual para políticos y periodistas en México es el más mortal que se haya visto. En 2020, en México fueron asesinados más periodistas que en cualquier otro país del mundo”, comentó.

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Las acusaciones de que el presidente Andrés Manuel López Obrador tiene vínculos con el crimen organizado también se han dado en México. Hace unos días, el morenista Porfirio Muñoz Ledo acusó que México tiene un “narcogobierno” y le advirtió al presidente que no era “heredable su contubernio con el narco”.

El excandidato del PRI a la presidencia Francisco Labastida acusó de que el presidente favorece al Cártel de Sinaloa.

El lunes, el presidente acusó que antes de las elecciones hubo una campaña en su contra acusándolo de nexos con el crimen. “Antes de la elección arman una campaña para decir que tengo vínculos con el narcotráfico, sin una sola prueba”, dijo.

Ante todos las acusaciones, el presidente respondió: “Yo no soy Felipe Calderón, aunque no les guste, no solo a sus más cercanos simpatizantes, sino a muchos que votaron por él, pero hay que saber rectificar, no caer en la autocomplacencia, es de sabios cambiar de opinión y la verdad nos hará libres”.

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