La Guardia Nacional (GN), creada hace casi tres años, realiza más labores que las que le asignaron por ley y, sobre todo, sigue sin tener un mando y una formación civil, pues depende de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
Así lo señaló este viernes el Observatorio de la Guardia Nacional y la Militarización en México al presentar su informe correspondiente a 2021 ante el Instituto Belisario Domínguez del Senado de la República.
Durante la ponencia del informe, María Elena Morera, presidente de la organización Causa en Común —parte del observatorio— recordó que a la Guardia Nacional se le confirieron 43 atribuciones legales.
Pero el observatorio corroboró que en realidad hay más de 200 funciones asignadas, entre las que destacan:
Respecto a la integración de la corporación, que suponía sería civil, pues cumpliría funciones de seguridad pública, se encontró que de los más de 110,000 elementos de la GN, 73,000 son de la Sedena; 17,000 de la Marina; 23,000 son expolicías federales y se esperan a otros 50,000 uniformados.
"Vemos que no se reporta el reclutamiento de civiles, su conformación solo corresponde a 'transferencias' de otras instituciones y la mayoría de sus plazas están en las Fuerzas Armadas", resaltó Morera.
Además, evidenció que no hay transparencia respecto a la formación de los elementos de la GN. Lo único que se sabe es que, hasta noviembre de 2021, solo 20,995 uniformados contaban con el Certificado Único Policial, es decir, el 20% de la plantilla.
El 28 de mayo de 2021 venció el plazo para que todos los elementos contaran con ese certificado de desempeño y control de confianza, al no lograrlo, el plazo se amplió a mayo de 2024.
"Creemos que ni así se logrará, porque faltan alrededor de 90,000 elementos, más los otros 50,000 que pretenden reclutar", dijo la activista.
Otra irregularidad detectada es que no se justifica el despliegue de elementos en cada estado. Por ejemplo, si el criterio fuera por violencia homicida, Guanajuato tendría que ser la entidad con más elementos de la GN, pero solo tiene 6,603. Mientras que la Ciudad de México, que está en el número 12 del índice de violencia homicida, tiene 13,102 elementos.
Y si el criterio fuera por número de habitantes, el Estado de México, Veracruz o Jalisco deberían tener el doble de elementos, no la Ciudad de México.
A esto se suma que, en casi tres años, tanto la Sedena como la GN suman 1,742 quejas, que incluyen casos de tortura, desapariciones, tratos cueles, inhumanos o degradantes, y detenciones arbitrarias.
María Elena Morera refirió que la GN es una "simulación", pues se trata de una corporación militar dirigida por las Fuerzas Armadas.
También indicó que el gobierno actual ha incrementado como ningún otro la presencia de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad publica y otras facultades, para lo cual destina gran parte de su presupuesto.
La GN ha ejercido un presupuesto de 63,000 millones de pesos y la Sedena de 104,000 millones de pesos. En conjunto, es el segundo presupuesto más importante de esta administración, después del programa de pensiones.
No están formando a los elementos de la GN como una policía civil, promesa que quedó plasmada en la constitución.
