El próximo 24 de diciembre, la Corte Suprema de Chile dará respuesta a la solicitud del gobierno mexicano de extradición de Mauricio Toledo, exdiputado federal y exalcalde de Coyoacán.
Así lo dio a conocer este viernes la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ-CDMX), que informó sobre los detalles del segundo día de audiencia, en la que se presentaron más testimonios y pruebas contra Mauricio Toledo.
En un mensaje a medios, Ulises Lara, vocero de la FG-CDMX, indicó que el ministro que lleva el caso solicitó dos días más para analizar las pruebas, de manera que fijó el 24 de diciembre como fecha límite para la lectura de la sentencia, que será notificada por correo a las partes.
Cabe señalar que en la audiencia del jueves, el magistrado había establecido un plazo de cinco días para el desahogo de pruebas, por lo que la sentencia se emitiría e 21 de diciembre.
Mensaje a Medios del Vocero de la Fiscalía General de Justicia CDMX, Ulises Lara López
— Fiscalía CDMX (@FiscaliaCDMX) December 17, 2021
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"En el transcurso de la audiencia, la fiscalía de Chile reiteró que se cumplieron con los requisitos para acceder al pedido de extradición y que (Mauricio Toledo) sea entregado a las autoridades mexicanas para que sea juzgado", dijo Lara.
De acuerdo con el funcionario, en esta comparecencia se recalcó que no hay prueba concreta de la imputación contra Toledo se trate de una persecución política, tal como él alega. Además, recordó, su desafuero en México fue aprobado por una amplia mayoría, incluso de su propio grupo parlamentario.
"También se demostró que el delito de enriquecimiento ilícito está vigente, y que entre 2011 y 2018, (Toledo) aprovechó sus cargos para beneficiarse económicamente", agregó el vocero de la fiscalía capitalina.
A diferencia de la audiencia previa, en esta, Mauricio Toledo se negó a declarar cualquier cosa.
Durante la comparecencia del jueves, el magistrado Mauricio Silva Cancino preguntó al exedil de la alcaldía Coyoacán en la Ciudad de México si aceptaba la extradición a México o prefería enfrentar el proceso en Chile.
Toledo, quien mantuvo su posición de considerarse un "perseguido político", respondió que enfrentará el proceso penal, pero sin ser trasladado a México.
