Desde que la sustancia activa de la vacuna contra COVID-19 de AstraZeneca procedente de Argentina llega a la planta de Liomont en México, pasan alrededor de ocho días para que salga lista para distribuirse y ser aplicada en millones de personas.
Fue en 2020 cuando los gobiernos de México y Argentina, de la mano de la Fundación Carlos Slim, anunciaron un acuerdo para producir 250 millones de dosis en la planta de Liomont y desde entonces, han salido más de 60 millones de dosis desde esta planta en Ocoyoacac, en el Estado de México.
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La producción lograda es apenas una cuarta parte de lo pactado, en parte por los problemas de insumos que hubo a inicios de este 2021. No obstante, la empresa mexicana señala que ya cuenta con el abasto necesario y se trabaja de manera ininterrumpida para producir entre 14 y 18 millones de dosis al mes.
“Tenemos un equipo de alto desempeño que está fabricando la vacuna COVID”, dice Sergio Valentinotti, director de Ciencias de la Vida de Liomont, al destacar la gran oportunidad de México, de contar con una planta para ser autosuficientes en la producción de vacunas no solo para COVID.
Jesús Reyes Guarneros, gerente de ingeniería y mantenimiento, detalla el proceso que se realiza desde que se recibe la sustancia. Primero, se descongela –lo que tarda entre 22 y 24 horas– para que esté a temperatura ambiente y se esteriliza. Luego se hace el llenado de fracos bajo mecanismos de filtrado y seguridad.
El vial de AstraZeneca pasa por dos procesos de revisión, una mecánica y otra manual, para garantizar que las vacunas son de calidad. (Foto: Ariadna Ortega/Política Expansión)
Posteriormente se pasa al proceso de revisión automática y “cosmética”, la cual es manual; de etiquetado y finalmente empaquetado para estar listo para distribuirse en México y en Latinoamérica, a excepción de Brasil.
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Reyes Guarneros asegura que todo este “exhaustivo” proceso permite garantizar la calidad de la vacuna. “La suma de la revisión automática, más la revisión manual, nos permiten garantizar la calidad del vial tanto del líquido como del exterior”, afirma.
Somos más de 300 personas. Esta planta trabaja 24/7. No paramos nunca, no descansamos en días festivos. Solamente de esa manera hemos logrado fabricar un gran número de vacunas.
Gerardo Teja, líder de Planeación y Suministro de AstraZeneca, resume el proceso de fabricación de la vacuna así:
Se descongela el principio activo.
Se hace el proceso de preparación de la preparación de la vacuna, a través de los componentes que acompañan al principio activo.
Se hace la mezcla de los mismos.
Se hace un filtrado aséptico.
Se llenan los viales.
Se coloca la tapa .
Se pone el sello de protección.
Una vez que se hacen los viales (frascos), se hace una verificación para ver si va totalmente limpio, luego “cosmético” para revisar si no hay ningún imperfecto; después se colocan las etiquetas del producto y se coloca su código y caducidad. Por último, se colocan en las cajas 10 unidades y se pasa al proceso de serialización para saber que es un producto de calidad y puede rastrearse.
El proceso de fabricación y envasado en Liomont toma alrededor de ocho días desde que llega la sustancia de Argentina a la planta en Ocoyoacac, Estado de México. (Foto: Ariadna Ortega/Expansión Política)
En México, millones de personas han recibido una protección ante COVID-19 que ha cobrado la vida de 295,893 mexicanos desde que inició la pandemia.
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Los funcionarios corporativos destacaron que Liomont fue designado por AstraZeneca como responsable del proceso final de formulado y envasado de la vacuna contra COVID-19, porque cumple con todos los estándares de producción de las agencias regulatorias en México, Estados Unidos y la Unión Europea.
México, además de este acuerdo de envasado, adquirió 77.4 millones de dosis para hacer frente a la pandemia –y ha entregado más de 71 millones– con lo que se convirtió en uno de los 170 países que han recibido sus vacunas de los más de 2,000 millones que el laboratorio ha distribuido a nivel mundial.
