Al final de ese periodo, el instituto realizará los “cruces” que presente cada promovente para evitar duplicaciones o apoyos falsos y determinará cuáles son válidas o si hay duplicaciones o son inválidas. El INE cuenta con un registro de 22,415 personas y organizaciones activas que impulsan ese ejercicio.
La entrega de los formatos físicos solo se realiza en las oficinas de la secretaria ejecutiva del INE, esto es, en sus oficinas centrales de Viaducto Tlalpan 100, colonia Arenal Tepepan, Alcaldía Tlalpan o en las juntas locales ejecutiva.
“El INE va a verificar la autenticidad (de cada formato físico que reciba). Esto requiere más trabajo y más tiempo, sí, pero el instituto prefiere usar más tiempo a validar firmas falsas”, resaltó el consejero Rivera a pregunta expresa.
El papel y la aplicación
Para Jaime Rivera, la aplicación digital que desarrolló el INE para recolectar firmas de apoyo durante la constitución de partidos nuevos, la verificación de la militancia partidista o los apoyos ciudadanos para candidatos independientes, es “más fácil de usar” que recoger las firmas en papel.
Ello, porque de acuerdo con el instituto, se trata da un procedimiento que simplifica y optimiza la utilización de los recursos en la captación y validación, evitando el uso, manejo, traslado, revisión y verificación de la documentación fuente, la captura de la información, lo que reduce los errores de captura, así como la pérdida de documentos y los costos asociados.
Así, desde 2017, la aplicación móvil ha recabado 17.5 millones de firmas, dando certeza a los procesos de participación ciudadana. Ello, dado que se ha utilizado durante los procesos de consulta popular, candidaturas independientes, iniciativas de ley, creación de partidos y organizaciones sociales.