Murayama habla siete años después
Siete años después, el consejero Murayama Rendón recordó ese episodio. “El 30 de septiembre de 2014 en esta sala (del Consejo General), se vivió una sesión muy diferente”, dijo.
“Me acuerdo una frase en su momento que dije: No les pedí permiso a los partidos para decidir a quién voy a respaldar y no les voy a pedir perdón”, rememoró.
El pasado 30 de septiembre concluyeron su presidencia los titulares de los OPLEs de Baja California Sur, Campeche, Ciudad de México, Colima, Guanajuato, Guerrero, Jalisco, Nuevo León, Oaxaca, Querétaro, San Luis Potosí, Sonora, Tabasco y Yucatán.
Murayama dijo que las autoridades electorales tienen la obligación de colocarse por encima de esos intereses particulares y velar por el interés general a través de la observancia de los principios rectores de la función electoral definidos en la Constitución.
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Expuso que, al final, la responsabilidad de las designaciones de esa primera generación de consejeros “fue nuestra al 100 por ciento”, de tal suerte que “no deben su cargo a ninguna fuerza ni personalidad política, menos aún a un consejero del INE en lo individual (…) cumplieron con su responsabilidad”.
La culminación de la primera generación de OPLEs, marca al mismo tiempo el inicio de un nuevo ciclo de autoridades locales electorales que “deben persistir como parte fundamental del diseño federal y republicano de la nación”, externó el consejero.