Ramos dio a conocer esto un día después de que policías tomaran las instalaciones de la UDLAP, en acatamiento a una orden judicial promovida por el nuevo patronato, que acusa al anterior de fraude. Ante los hechos, Derbez señaló el martes en una videoconfencia de prensa que esa toma fue un acto arbitrario. En este conflicto, él es investigado por posible falsificación de documentos, abuso de facultades y simulación de sesiones en perjuicio de la universidad y de su patrimonio.
El nuevo patronato de la Fundación Universidad de las Américas Puebla lo conforman cinco integrantes, presididos por Horacio Magaña Martínez. Fueron designados en mayo por la Junta para el Cuidado de las Instituciones de Beneficencia Privada de Puebla, debido a que integrantes de la familia Jenkins, ligados al anterior patronato, están prófugos de la justicia por su probable responsabilidad en un fraude por más de 14,000 millones de pesos.
Fueron los integrantes del nuevo patronato quienes solicitaron apoyo a un juez federal para poder tomar posesión de la UDLAP con la fuerza pública, lo que ocurrió este martes. Derbez se niega a reconocerlos y sigue considerando a Margarita Jenkins de Landa como la presidenta del patronato de la institución académica.

¿Qué pasará con los trabajadores y las clases?
Una vez que fueron tomadas las instalaciones y cambió el control de las cuentas bancarias de la UDLAP, surgió incertidumbre entre el personal académico y administrativo, al igual que entre los universitarios, sobre qué ocurrirá.
En la entrevista, Ramos garantizó que no habrá despidos, por lo que pidió a los empelados estar tranquilos, pero adelantó que los policías permanecerán en el campus el tiempo que sea necesario para evitar confrontaciones con Derbez o con los otros representantes del antiguo patronato.