En el proceso electoral de este año, el Instituto Nacional Electoral (INE) implementó más normas para garantizar una participación paritaria y que más mujeres lograran llegar a cargos públicos.
Esto, además, coincidió con la conclusión de la 64 Legislatura, que al configurarse en 2018 fue nombrada la "legislatura de la paridad de género", pero ¿qué tanto se ha avanzado en materia de igualdad al momento de la participación y la toma de decisiones?
En la mesa de diálogo 'Elecciones y violencia de política de género. ¿Cómo vamos en este 2021?', realizada este jueves por Expansión Política, la diputada federal Adriana Dávila; la exdiputada local y presidenta del colectivo 50+1, María Elena Orantes, y la consejera electoral Dania Ravel, coincidieron en que "la paridad no es sinónimo de igualdad", y expusieron algunos ejemplos.
"En la legislatura de la paridad hubo retrocesos, uno de ellos la desaparición de las estancias infantiles. Entonces, la primera reflexión es que paridad no es lo mismo que igualdad", expresó Dávila, del grupo parlamentario del PAN.
La legisladora consideró que este tipo de situaciones responde a que la participación de las mujeres en la vida política genera miedos y provoca reacciones negativas entre quienes se resisten a cumplir con las normas de paridad.
En este sentido, María Elena Orantes consideró que pese a los lineamientos para evitar la violencia política contra las mujeres, este es el proceso electoral en el que más casos se han visto.
"Este péndulo que aventamos para lograr la paridad total ha regresado con más violencia, sintiendo que las mujeres, en este derecho de la igualdad sustantiva 50/50, estamos quitando espacios que además nos corresponden", indicó.
Dania Ravel enfatizó que hay muchas cuestiones que evidencian que la paridad no significa que las mujeres estén compitiendo en condiciones de igualdad, entre las que destacan cómo se realiza la cobertura en medios de comunicación y el reparto de dinero que hacen los partidos políticos.
"(Las mujeres) no tienen acceso igualitario a los medios de comunicación. A pesar de que ya tenemos el mismo número de candidatas y candidatos postulados, el 67% del tiempo en estos espacios es para los hombres, de acuerdo con el monitoreo que se hace con la UNAM, y además a las mujeres se les hace una cobertura estereotipada.
"También los recursos públicos, sobre todo cómo se reparten a nivel local. En 2018 advertimos que había una brecha del 24% entre lo que reparten a candidatas y candidatos para hacer campaña", expuso.
La consejera también recordó que aunque ya hay una norma que establece paridad en todos los cargos de elección popular, por parte del Congreso no hubo una configuración legal, sino que se resolvió con un transitorio en el que se señalaba que debía hacerse todo lo posible para que pudiera cumplirse este principio, pero, lamentó, eso tampoco ocurrió.
Fue en ese momento cuando el Instituto Nacional Electoral (INE) intervino y determinó que al menos siete de las 15 gubernaturas que están en juego debían ser disputadas por mujeres.
"Entonces, tuvimos impugnaciones de un partido y del Senado de la República. Es ahí donde no ves la congruencia entre el discurso público y los hechos. Ese tipo de elementos hace que las mujeres todavía no estén compitiendo en condiciones de igualdad", dijo Ravel.
La diputada Adriana Dávila consideró que esta resolución del INE sobre las postulaciones a las gubernaturas "puso a temblar" a los partidos, y esto hizo más evidente la desigualdad, pues los institutos políticos colocaron a las mujeres en los distritos y estados menos rentables. En el caso de las reelecciones para diputaciones federales, la legisladora expuso:
"Se supone que nuestras trayectorias deberían estar pesando, pero los partidos les dieron más oportunidad a los varones de reelegirse. En mi partido, el 68% de quienes se reeligieron son varones y solo al 44% de las mujeres se les permitió".
María Elena Orantes puntualizó que el objetivo del colectivo 50+1, al que se han sumado políticas y políticos de todos los partidos es que haya una verdadera paridad e igualdad, además de demostrar que no solo los hombres tienen "rentabilidad política".
"Han demostrado mujeres, y lo han demostrado bien, que pueden ganar. Con este acuerdo, que busca que haya paridad e igualdad, estamos viendo a todas las candidatas decir lo mismo: queremos tranquilidad, que haya paz y transitar sin violencia", expresó.
