Según los datos de la Encuesta para la medición del impacto COVID-19 en la educación (ECOVID-ED), del INEGI, se destaca que de las 33.6 millones de personas entre 3 y 29 años inscritas en el ciclo escolar pasado, 5.2 millones no se inscribieron en el actual y 738,400 no lo concluyeron, de los cuales el 58.9% fue por algún motivo relacionado con la epidemia, 8.9% por falta de recursos y 6.7% por tener que trabajar.
De los que no terminaron el curso, los motivos específicos asociados a COVID-19 por los que no concluyeron fueron:
- 28.8% Perdió el contacto con maestras/maestros o no pudo hacer tareas.
- 22.4% Alguien de la vivienda se quedó sin trabajo o redujeron sus ingresos.
- 20.2% La escuela cerró definitivamente.
- 17.7% Carecía de computadora, otros dispositivo o conexión a internet.
El ejercicio del INEGI sobre los efectos de la pandemia en la educación se realizó a través de encuestas telefónicas a personas de más de 18 años.
David Calderón, director de Mexicanos Primero, comentó que esto le da un “sesgo”, pues quedan poco representados los de menos recursos y comunidades indígenas y la situación puede ser aún más grave.
“La encuesta del INEGI es una consulta muy sólida, pero es aleatoria, un sondeo, mientras que los datos con registro con nombre y lugar de quién no está acudiendo a la escuela los tiene la SEP”, comentó al recordar que desde la Secretaría de Educación Pública no se han dado a conocer los datos ni de abandono escolar como de rezago educativo.
INEGI nos ayuda a confirmar que debemos estar alarmados, los datos de la SEP nos pueden decir cómo y con quiénes ya actuar para revertir lo que sea posible de estos daños. David Calderón.
El ejercicio del INEGI se publica a un año de que iniciaron las clases a distancia por la pandemia de COVID-19, en un contexto en el que la SEP está preparando el regreso a clases presencial.