Marko Cortés, dirigente nacional del PAN, pidió al gobierno federal nombrar a un “zar de vacunación” para que la aplicación de estas inmunizaciones contra el COVID-19 se realice con criterios médicos y no políticos.
Acción Nacional solicitó además que no sea desde la Federación que se adquieran las dosis de las vacunas, sino que se permita a los estados comprarlas por su cuenta para que el gobierno federal se deje ayudar.
“En Acción Nacional exigimos un zar de vacunación que sí sepa, que sí pueda sacar adelante un programa nacional de vacunación. Exigimos que los gobiernos estatales sí puedan adquirir vacunas, no entendemos la necedad de negarnos esa posibilidad”, dijo en conferencia Marko Cortés.
Por su parte, el diputado Éctor Jaime Ramírez Barba explicó que el artículo 5 de la Ley General de Salud señala que el Sistema Nacional de Salud está constituido por dependencia y entidades de la administración pública tanto federal como locales, así como las personas físicas y morales que presten servicios para dar cumplimiento a este derecho.
“Si el gobierno mexicano pudo conseguir que le mandaran ahorita 125,000 dosis y los gobiernos de los estados pueden comprar con esa compañía más dosis de esa misma vacuna, ¿cuál es el impedimento? Cuando Acción Nacional lo que está diciendo es pongamos al ciudadano a la ciudadana en el centro de la acción política, no hay necesidad de ir a ningún ley, no hay quien restringa”, señaló el legislador panista.
La semana pasada, ante el anuncio de la Alianza Federalista de solicitar que los estados miembro puedan adquirir la vacuna, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, dijo que no era posible.
"La Ley General de Salud estipula que son facultades del gobierno federal o de la Secretaría de Salud organizar las medidas de prevención y control con colaboración de autoridades sanitarias estatales. Hay toda clase de elementos, desde ética, sentido común y de la ley que hacen ver que el aspirar a tener compras fragmentadas no lleva a buen puerto para ciudadanos del mundo, incluyendo al país; entonces, no, no es posible", afirmó en conferencia.
Hasta el momento, solo la vacuna de Pfizer-BioNTech ha sido aprobada por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), la cual está próxima a llegar al país para iniciar la aplicación de las dosis a 125,000 personas, debido a que el pedido es por 250,000 pero se tiene que aplicar dos veces en un plazo de más de 20 días.
El gobierno federal firmó un contrato con la empresa farmacéutica por un total de 34.4 millones de esquemas, que alcanzan para 17 millones de personas aproximadamente. En el primer trimestre del año, llegarán otras ocho millones de dosis y así a lo largo del año.
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Ramírez Barba expuso que no están diciendo que las compras se realicen sin el permiso de la Cofepris, pero indicó que si los gobiernos estatales pudieran adquirir esos excedentes de vacuna que existirán para el 2021 no hay impedimientos para que lo puedan hacer. Reconoció que los requerimientos para la aplicación de Pfizer son complejos, por lo que pensar que será distribuida en todos los municipios es “iluso”.
La Política Nacional de Vacunación presentada la semana pasada señala que estas primeras dosis se aplicarán al personal médico que está en la línea de batalla, en tanto que conforme vayan llegando más se irá ampliando la población inmunizada para alcanzar una cobertura de 75% para marzo de 2022.
