"Por ejemplo, entre 2002 y 2007, García Luna presuntamente ayudó a, al menos, seis envíos de cocaína por un total de más de 50,000 kilos. Además, los acusados colocaron a otros funcionarios corruptos en posiciones de poder en ciertas áreas de México controladas por el Cartel de Sinaloa", se agrega en el documento.
De acuerdo con lo informado, si Cárdenas Palomino y Pequeño García son declarados culpables de un cargo de conspiración de drogas, enfrentarán una sentencia mínima obligatoria de 10 años de prisión y un máximo de cadena perpetua.
El tribunal también hizo una nueva acusación contra García Luna, arrestado el 9 de diciembre de 2019 por agentes federales en Dallas, Texas, quien actualmente está pendiente de juicio en el Distrito Este de Nueva York.
Seth D. DuCharme, fiscal interino de EU para el Distrito Este de Nueva York, anunció una nueva acusación de reemplazo acusándole de participar en una empresa criminal continua y declaró:
"Como se alega, durante casi dos décadas, García Luna traicionó a quienes había jurado proteger al aceptar sobornos de miembros del Cártel de Sinaloa para facilitar sus crímenes y potenciar su empresa criminal”.
El Departamento de Justicia de EU detalló que García Luna y sus conspiradores enfrentarán los delitos que involucran la importación y la distribución de cantidades masivas de drogas peligrosas hacia ese país, y en caso que el extitular de Seguridad Pública sea declarado culpable de este nuevo cargo, podría enfrentar una sentencia mínima obligatoria de 20 años de prisión y un máximo de cadena perpetua.
Cuando García Luna fue detenido, las acusaciones que pesaban en su contra eran tres cargos de conspiración de tráfico de cocaína y un cargo de hacer declaraciones falsas.
El 15 de julio de 2015, Pequeño García fue cesado de su cargo como jefe de la División de Inteligencia de la Policía Federal, por instrucción del secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, después de la fuga de Joaquín “El Chapo” Guzmán del penal del Altiplano I, ubicado en Almoloya de Juárez, Estado de México. Su destitución se debió a que él tenía a su cargo el monitoreo remoto de los penales federales.