México suma 1,378 casos de enfermos de COVID-19 y 37 fallecimientos causados por el virus, reportó la Secretaría de Salud federal, que también reveló que alrededor de 70 millones de mexicanos han reducido su movilidad en medio de la contingencia.
Además de los casos positivos, hay otros 3,827 bajo sospecha y 7,073 ya fueron descartados, de acuerdo con el último reporte sobre el panorama del nuevo coronavirus en el país dado a conocer este miércoles.
José Luis Zegarra Alomía, director de Epidemiología, detalló que el 46% de las personas que han enfermado de COVID-19 ya recibió el alta, mientras que el 51% se mantiene en aún en aislamiento y el 3% restante representa los casos de las personas que han fallecido.
La mayoría de los decesos se han registrado en la Ciudad de México (8); Sinaloa (4); Hidalgo y Jalisco (3 en cada uno); San Luis Potosí, Coahuila, Baja California (2 cada uno); Durango, Edomex, Michoacán, Morelos, Oaxaca, Puebla, Querétaro, Quintana Roo, Veracruz, Guerrero, Nayarit, Tabasco y Zacatecas (un fallecimiento en cada entidad).
Hugo López-Gatell, subsecretario de prevención y promoción de la Salud, dijo que se estima que se ha reducido la movilidad de 70 millones de personas en el país, por lo que no ve necesario declarar un estado de excepción.
"Debemos sentirnos satisfechos de tener una comunidad tan participativa", sostuvo el funcionario este miércoles, luego de que el fin de semana anunció que las medidas de sana distancia y aislamiento voluntario no se estaban aplicando con "rigor", lo que impactaría en el crecimiento acelerado del contagio que se está dando en el país.
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El subsecretario aseguró que México no utiliza las pruebas rápidas para detectar el COVID-19, pues estas no están acreditadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
“Ninguna autoridad sanitaria competente del mundo ha acreditado pruebas rápidas”, aseguró y detalló que representantes de la Administración de Alimentos y Medicamentos de EU (FDA, por sus siglas en inglés) le aseguraron que no han avalado ninguna prueba rápida.
Las declaraciones sobre las pruebas rápidas se dan horas después de que el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, dijera que los mandatarios estatales solicitaron al gobierno federal establecer cuáles pruebas podrían aplicar y adquirir para diagnosticar la infección de este virus.
El mandatario señaló que las pruebas que su gobierno adquirió no han podido ingresar al país porque no tienen la certificación de Cofepris y afirmó que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador se comprometió a dar respuesta en no más de 72 horas.
"No quiero yo pensar que lo que esta haciendo López-Gatell es cuidar la estadística, porque sería, literal, un acto de traición a la patria", dijo Alfaro en una conferencia de prensa previa.
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Los gobiernos de los estados y el federal acordaron un pacto de gobernabilidad y de unidad ante la emergencia sanitaria por el coronavirus COVID- 19, que este miércoles ya tuvo repercusiones electorales, debido a que los procesos para renovar el Congreso de Coahuila y ayuntamientos en Hidalgo se suspendió hasta que haya condiciones para celebrarlos, según determinó el Instituto Nacional Electoral (INE).
Y aunque el pasado lunes se declaró emergencia sanitaria por el COVID-19 y se recomendó suspender actividades no esenciales, el presidente Andrés Manuel López Obrador mantiene sus recorridos por el país; tan solo para este fin de semana tendrá eventos en el Estado de México, Ciudad de México y Morelos, las dos primeras entidades son las que más casos de enfermos con el nuevo virus reportan.
López Obrador ha señalado que se mantendrá activo en la contingencia y que no se aislará porque sus adversarios políticos buscan ocupar su ausencia para tomar el control del país. No obstante, en al menos una de sus reuniones ya se ha presentado una persona que posteriormente fue detectada con COVID-19, es el caso del gobernador de Hidalgo, Omar Fayad.
La Secretaría de Salud descartó que por el momento se requiera hacer una prueba al presidente debido a que no presenta síntomas, justo este martes su temperatura se mantuvo dentro de los parámetros normales. Su actitud dista de otros mandatarios que se han sometido a un test de detección de la nueva cepa de coronavirus, como es el caso de Donald Trump (EU) o Jair Bolsonaro (Brasil), entre otros.
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