“El hecho de estar confinados, es un estrés también de carácter económico porque algunas de estas familias perdieron el padre o la madre, o ambos, perdieron el empleo y tienen también el estrés económico, tienen el estrés por el confinamiento, tienen el estrés por una convivencia mucho mayor a la que no están acostumbrados, por supuesto que también es muy probable que se haya incrementado la violencia”, explicó.
Aunque hay algunas organizaciones como México Evalúa que refieren que durante la etapa de aislamiento social como medida para evitar la propagación de contagios ha implicado de un incremento de hasta casi el 100% en algunos delitos, la también ministra en retiro de la Suprema Corte aseguró que es complicado aún saber el incremento en la violencia doméstica.
Lo que sí, precisó, es que los feminicidios no han escalado por el confinamiento. “Los feminicidios básicamente tenemos las mismas cifras que teníamos antes de la pandemia”, indicó.