Sin cuarentena
En la mayoría de países de la región se han establecido cuarentenas obligatorias, limitando enormemente la movilidad.
No así en México, que extendió hasta el 30 de mayo la llamada Jornada Nacional de Sana Distancia, que contempla el cierre de actividades no esenciales y exhorta a la población a quedarse en casa, pero sin sanciones para no perjudicar a los millones de empleados de la economía informal.
"En una población con estas características (de pobreza) no podemos sostener restricciones de la movilidad", reiteró.
Además, adelantó que no se descarta extender las medidas de distanciamiento social, pues la prioridad es "proteger" la vida de las personas.
Además, hay un 15% de empresas "no esenciales" que se están resistiendo a cerrar, y grandes empresarios como Ricardo Salinas Pliego han rechazado la gravedad de la pandemia.
Desde el gobierno "hemos recibido por millares oficios, cartas y peticiones de distintas compañías" que piden mantenerse en activo, reconoció el doctor.
De la salud a la política
El presidente Andrés Manuel López Obrador causó controversia al comienzo de la pandemia al negarse a cancelar durante semanas sus giras e incluso aseguró que venía "como anillo al dedo" para afianzar la transformación del país.
"Él es un personaje político", dijo López-Gatell, pero aseguró que en el país la crisis sanitaria se gestiona a partir de médicos y científicos, tal y como dijo el propio mandatario ante el G20.
Y en medio de a epidemia, López-Gatell se ha encumbrado como el hombre del momento en México, portada de revistas y fuente de 'memes'.
"Mi persona es irrelevante para el fenómeno, pero lo importante es que la población esté atenta y conociendo el fenómeno", añadió.
¿Pero de cumplirse la optimistas previsiones de México, su nombre podría sonar como futuro presidente? "Yo no soy un político, yo soy un técnico. Esa es mi naturaleza", respondió.