El 'muro mexicano’ disminuye la migración a Estados Unidos

Sin embargo, a pocos meses de asumir el Poder Ejecutivo, su postura cambió debido a la amenaza del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien anunció que impondría aranceles de 5% a las importaciones de productos mexicanos si no se detenía el flujo migratorio centroamericano desde México.

El enviado para “apagar el fuego” de esa amenaza fue el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, quien negoció que, a cambio de no fijar un gravamen progresivo, México se comprometía a disminuir la afluencia de migrantes centroamericanos.

Te recomendamos: EU agradece freno de migrantes, mientras organizaciones alzan la voz

Y es que, en ese hasta antes del acuerdo entre ambos países, las detenciones de migrantes en la frontera entre ambos países iban en aumento por parte de la Patrulla Fronteriza en Estados Unidos. En enero de 2019, fueron detenidos 58,317; en febrero, 76,545; en marzo, 103,731; en abril, 109,415, y en mayo 144,116.

Pero a partir del acuerdo entre los gobiernos de Donald Trump y Andrés Manuel López Obrador, los números fueron a la baja; tanto que en cinco meses, se logró una disminución de 70% en las detenciones realizadas por la Patrulla Fronteriza.

Migrantes detenidos por la Patrulla Fronteriza en EU

En México, los operativos fueron calificados por la prensa como el “muro mexicano de Trump” también funcionaro. De acuerdo con el comisionado del Instituto Nacional de Migración (Inami), Francisco Garduño, de enero a diciembre de 2019, se presentaron ante la autoridad migratoria 179,137 personas extranjeras, de las que fueron retornadas 178,960, es decir el 99.8%.

El 57% de los migrantes fueron presentados de mayo a noviembre; es decir, en el mismo lapso en que se puso en marcha la nueva política migratoria en México.

Del Triángulo Norte de Centroamérica procedía el 95% de los migrantes que la autoridad migratoria mexicana regresó a sus países de origen: Honduras (50%), Guatemala (33%) y de El Salvador (12%).

A partir de acuerdo migratorio, México desplegó alrededor de 25,000 elementos de la Guardia Nacional en sus dos fronteras.

Inicialmente, se desplegaron 15,000 elementos de la Guardia en la frontera norte; otros 2,000 en la frontera sur y 4,500 más en la zona del Istmo de Tehuantepec, pero conforme pasaron los meses se fueron sumando más miembros del nuevo cuerpo de seguridad y ubicando en las zonas en las que más se requería.

Te puede interesar: "Es más difícil regresar que volver a intentarlo", consideran migrantes

El gobierno de México, a través del canciller Marcelo Ebrard, defendió la presencia de la Guardia Nacional en tareas de migración y afirmó que siempre se actuó en estricto apego a los derechos humanos. Incluso, informó que, de junio a noviembre, fueron "rescatados" 278,995 migrantes, de los cuales 58,909 fueron gracias a labores de la Guardia Nacional, 41,649 de la Secretaria de Seguridad Pública y 178,437 por el Inami.

Pese a esa labor de contención de la migración, el titular de la SRE descartó que México le hiciera el trabajo sucio a Estados Unidos o que se hubiera convertido en un tercer país seguro y dijo que lo único que estaba haciendo esta administración era aplicar la ley.

“Lo que estamos haciendo es cumplir la ley mexicana. La ley mexicana dice que toda persona que esté en nuestro territorio hoy -la ley vigente- tiene que estar registrada. Si usted quiere pasar por el territorio de México, usted tiene que decir cómo se llama, a dónde va, qué va a hacer, etcétera; lo que nos sucede a todos, bueno, a los mexicanos, cuando llegamos de regreso a nuestro país. Se están aplicando normas nacionales, por supuesto que es potestad del Legislativo cambiarlas, pero hoy por hoy lo que se está aplicando es esa ley”, aseguró el pasado 26 de diciembre al presentar un balance de la política migratoria.

Convocada a través de redes sociales, a principios de enero se organizó una nueva caravana de migrantes, la caravana 2020, para cruzar México con destino hacia Estados Unidos.

Compuesta en su mayoría por ciudadanos hondureños, la caravana arribó a la frontera sur de México el sábado 18 de enero. Al grito de "¡Queremos trabajar!", los migrantes intentaron entrar a territorio mexicano, sin embargo, elementos de la Guardia Nacional ya estaban desplegados para impedirles el paso.

La tensión creció el lunes 20 de enero cuando la Guardia Nacional lanzó gases lacrimógenos a los cerca de 1,000 migrantes que buscaban cruzar el Río Suchiate, luego de que el gobierno mexicano rechazara otorgarles libre tránsito hacia Estados Unidos.

Lee: Muñoz Ledo tacha de "salvaje agresión" la respuesta de la Guardia ante migrantes

La secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, defendió la actuación de la Guardia Nacional y advirtió que los ingresos serán solo ordenados y en estricto respeto a las leyes mexicanas.

“La Guardia Nacional solo ordenó a los migrantes para entrar de esta forma a nuestro país. No hubo ningún incidente ni va a haber, no va a haber incidentes porque la instrucción del presidente de la República fue categórica: el respeto irrestricto al derecho de los migrantes”, comentó la encargada de la política interna del país.

Hasta el mes de enero 2020, el "muro mexicano de Trump" ha dado resultados, al menos los solicitados por el presidente estadounidense.