Tanto la entonces Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol, hoy Secretaría del Bienestar) y la de Desarrollo Territorial y Urbano (Sedatu) tuvieron denuncias sobre supuestos desvíos de recursos en la gestión de Berlanga al frente.
La exjefa de Gobierno del Distrito federal ha negado en reiteradas ocasiones irregularidades en sus gestiones.
La Auditoría Superior de la Federación (ASF) documentó que la manera en que se hacían los desvíos era a través de contratos otorgados a universidades estatales y otros organismos públicos, que a su vez subcontrataban a otras empresas para hacer trabajos de los que no se tenía constancia que se hubieran realizado, el esquema fue conocido como "La Estafa Maestra".
"A la Sedatu y a la Sedesol, como instituciones, les corresponde establecer convenios con las universidades. No les compete investigar lo que las universidades realizan porque son autónomas y somos respetuosos, por ley, de los procedimientos que ellas misma se dan", argumentó Robles en su comparecencia ante diputados en octubre pasado.
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